Las pautas de una correcta higiene alimentaria se dan por sabidas. Sin embargo, no siempre se aplican. Aún hay muchas cuestiones que se desconocen sobre cómo manipular o conservar los alimentos en el ámbito doméstico. El siguiente artículo clarifica las principales dudas en materia de seguridad alimentaria, entre ellas, el método más eficaz para eliminar patógenos o cuánto tiempo pueden estar los alimentos en el congelador.
La diversidad de microorganismos es tan grande, que las posibilidades de que estos lleguen a los alimentos son altas
En el medio ambiente hay gran diversidad de microorganismos y, por tanto, las posibilidades de que estos lleguen a los alimentos son altas. Los patógenos están presentes en el agua, en el suelo y en el aire. Así se entiende que todos y cada uno de los alimentos estén en riesgo de contaminación. El agua de riego, los patógenos localizados en la carne de los animales, las toxinas marinas… Incluso, los patógenos pueden introducirse en los alimentos en las líneas de procesado, a través del contacto con las personas infectadas que los manipulan o mediante la contaminación cruzada con las materias primas. En definitiva, los tablas de cortar son un utensilio que alberga una gran cantidad de bacterias en su interior, si no se llevan a cabo unas normas mínimas de higiene. Cualquier superficie no porosa, plástica o de madera puede ser un peligro. Solo si se mantiene en buenas condiciones, estas son seguras:
Deben ser lisas, de material no absorbente y de larga duración. El plástico es el menos poroso y, por tanto, un buen material.
Deben lavarse con agua caliente y jabón. Fregar y secar bien para eliminar cualquier tipo de resto, sobre todo, después de manipular alimentos crudos.
Es preferible desinfectar después con líquidos destinados a ello. Si se lava con lavavajillas, este proceso ya se considera realizado.