Es sabido que las nueces son un alimento bueno para el corazón porque reducen los niveles de colesterol. Este motivo lleva a muchas personas a comer una mayor cantidad de la cuenta, sin refrexionar que su aporte calórico es muy elevado. Por ello, aunque es saludable comer nueces cada día, mejor si se toman en antidades moderadas, es decir, entre 3 y 4 unidades.
Aliadas del corazón
Dentro de los frutos secos, las nueces concentran mayor grasa omega 3, una cantidad semejante a la del pescado azul
Las nueces contienen en su composición ácidos grasos poliinsaturados del tipo omega 3, una grasa que tiene efectos cardiosaludables. Su acción se centra en que disminuye el nivel de colesterol total en la sangre y reduce la viscosidad de la sangre, reduciendo así el riesgo de trombosis. De toda la gama de frutos secos que hay en el mercado, las nueces son las que concentran mayor cantidad de grasa omega 3, semejante a la del pescado azul.
Cargadas de energía
La ración recomendada diaria: 20-30 gramos, es decir, entre 4 y 7 nueces, aportan alrededor de 180 calorías
Las nueces son frutos secos y como tales destacan por su contenido en grasa. Más de las 3/5 partes de su peso corresponden a la grasa y esto hace que su contenido calórico sea muy elevado. Casi 180 calorías son las que aportan 30 g de nueces, unas 4-7 nueces, dependiendo de su tamaño.
Cómo incluirlas en la dieta
Es recomendable y saludable tomar entre 4 y 7 raciones de frutos secos a la semana. Puede tratarse de nueces, avellanas, almendras, cacahuetes, pistachos… Se considera una ración de frutos secos unos 30 g aproximadamente, lo que equivale a entre 4-7 unidades, dependiendo del tamaño.
Por tanto si se comen unas 3 o 4 nueces todos los días, se están cumpliendo las recomendaciones de dieta equilibrada. Si por cualquier motivo el consumo de nueces es excesivo un día en concreto, se puede compensar dicha cantidad en los próximos días, y reducir la ingesta de otras grasas como mantequillas o chocolates.
Si se tiene alergia a la nuez, una alergia no tan rara, conviene estar alerta en los restaurantes, pues alguna receta puede incluir la nuez de manera sutil y no específica
No hay que olvidar que las nueces son un producto susceptible de producir alergia. El famoso poeta uruguallo, Mario Benedetti, narra en sus memorias cómo el saberse alérgico a este fruto seco le conllevó a un gran susto. La reacción alérgica es muy dolorosa, y por lo general, salvo si se conocen antecedentes genéticos, la persona es consciente de su alergia a las nueces cuando después de su ingesta le hacen reacción. Su tratamiento en sencillo, pero sucede, muchas veces, y más ahora con las nuevas costrumbres culinarias, que la nuez forma parte sutil de una receta. Por ello, si se come en un restaurante y se tiene la mínima sospecha de que un plato puede llevar como ingrediente secundario nueces, hay que preguntarlo. Cuenta Benedetti que un simple ‘toque de nuez’ en un menú que parecía no tenerlo, le llevó de nuevo al hospital.
Los frutos secos son un buen acompañamiento de muchas recetas: ensaladas, guisos, postres.
Ensalada de escarola y nueces con crema de queso azul https://www.consumer.es/web/es/alimentacion/en_la_cocina/recetas/2005/03/31/140808.php
Tallarines salteados con nueces https://www.consumer.es/web/es/alimentacion/en_la_cocina/recetas/2005/10/19/146270.php
Leche cocida con nueces y pasas https://www.consumer.es/web/es/alimentacion/en_la_cocina/recetas/2004/01/08/93762.php
Intxaursalsa (sopa dulce de nueces) https://www.consumer.es/web/es/alimentacion/en_la_cocina/recetas/2005/12/13/147748.php
Tostadas de pan con crema de nueces https://www.consumer.es/web/es/alimentacion/en_la_cocina/recetas/2002/07/01/48481.php
Cardo con nueces gratinado https://www.consumer.es/web/es/alimentacion/en_la_cocina/recetas/2002/01/17/37559.php