Las maderas tropicales han sido y siguen siendo muy cotizadas por su gran belleza y resistencia, pero el intenso expolio al que han sido y siguen siendo sometidas las selvas ha provocado que la mayoría de estas grandiosas especies se encuentren en peligro de extinción. No obstante, se siguen utilizando para confeccionar muebles, tanto de exterior como para las diferentes estancias de las viviendas, debido a su extraordinaria consistencia y al mínimo mantenimiento que requieren.
Generalmente, este tipo de maderas se destinan a la ebanistería de lujo, al chapeado y al mobiliario de exterior por su gran resistencia ante los xilófagos, al paso del tiempo y las inclemencias climatológicas, lo que prácticamente asegura que los muebles durarán toda la vida.
A la hora de adquirir este tipo de muebles, se debe tener en cuenta el perjuicio ecológico que provoca el comerciar con estos productos de lujo. Para evitarlo, hay que asegurarse de que lleven el certificado que indique que provienen de explotaciones controladas.
Dos de las maderas tropicales más utilizadas son:
-teca: es la madera más resistente del mundo y su único enemigo declarado son las termitas. Es sumamente resistente a la acción de los hongos o a la humedad, no requiere de mantenimiento alguno pero resulta recomendable aplicarle aceite de teca para que mantenga su brillo, de lo contrario adquirirá un color gris plata que también resulta muy bello pero perderá su característico colorido original.
– ébano: sin duda alguna se trata de la madera preciosa más conocida y utilizada, debido a la espectacularidad de su color negro como el carbón y que dio el nombre a la profesión de los ebanistas. Además, ciertas clases de esta madera, procedentes de Asia y África, presentan un fino veteado blanco que provoca sorprendentes y bellos contrastes. Resiste a hongos, termitas e insectos y tiene una dureza casi extrema, lo que hace necesario taladrarla para realizar las uniones, ya que es un producto tan denso que prácticamente impide que la cola actúe. El ébano africano se emplea para la construcción de instrumentos musicales como guitarras o violines o esculturas, mientras que el asiático es el utilizado por los ebanistas para revestir sus muebles. El ébano africano es tan duro que no permite laminarse. Su enorme resistencia provoca que se emplee con asiduidad en el mundo de la tornería y la escultura debido a que no llega a astillarse y facilita mucho el trabajo a estos artesanos.