Las rayaduras estropean el aspecto de los muebles y de cualquier superficie de madera en general. Pero si las marcas o daños no son demasiado profundos, existen una serie de procedimientos muy simples para solucionarlos, a través de la aplicación de betún de Judea, cera para maderas, barniz e incluso elementos naturales como el ajo o frutos secos. En este artículo, se dan algunos trucos y técnicas para ocultar las rayaduras.
Trucos para disimular rayaduras
La madera es el material que predomina en el mobiliario de nuestro tiempo. En los hogares, por lo general, abundan los muebles de madera: mesas, sillas, estanterías, cómodas, chifonieres… Y es que la madera ofrece muchos beneficios, como su bajo costo, su durabilidad o su fácil manejo. Pero también presenta algunas desventajas. Una de las principales es lo expuesta que queda su superficie a rayaduras y arañazos que deterioran su aspecto y hasta pueden arruinar un mueble.
La manera más adecuada de eliminar esos desperfectos exige dos pasos: primero, lijar la superficie dañada (si hay que lijar poco o mucho depende de la gravedad de la rayadura), y segundo, barnizarla.
La manera más adecuada de eliminar las rayaduras requiere lijar la superficie dañada y luego barnizarla
Pero existen una serie de trucos para ocultar las rayaduras que aconsejan el uso de sustancias y materiales muy diversos. Uno de los más recomendados es el betún de Judea, en particular para superficies de color oscuro o muebles de acabado rústico. Esta tonalidad, que absorbe la luz, contribuye a que la marca sea menos visible. Si el daño es más visible, conviene usar cera para maderas, y cera dura si la profundidad del hueco es ya considerable. Tanto si se emplea betún de Judea como cera, para obtener un mejor resultado lo idóneo es pasar sobre la superficie un papel de lija fino antes de aplicar esa sustancia.
Para marcas poco profundas también existen otras maneras de solucionar el problema, basadas en el uso de elementos comunes en el hogar. El tipo y el color de la madera que haya sufrido la rayadura determinará si conviene más pasar un diente de ajo, un fruto seco como una nuez o una castaña, crayón, rotulador, aceite de hígado de bacalao, yodo o vaselina. Asimismo, se recomiendan las mezclas de pasta dentífrica o zumo de limón con aceite de oliva, o también café soluble con crema hidratante. En todos los casos, la sugerencia es dejar secar y luego pasar un paño seco.
Una rayadura en un mueble es un problema, pero también se puede ver como una oportunidad. Tal vez un pequeño defecto es una buena excusa para renovar un mueble por medio de la decoración y, así, darle nueva vida. Esto se puede lograr a través de técnicas como el decoupage o las veladuras.
En el primer caso, lo que se hace es decorar un mueble o un objeto con papeles que se pegan y luego se barnizan. El resultado: la apariencia de que el dibujo del papel está pintado sobre la superficie (que puede ser madera, cerámica, vidrio, tela, etc.).
Las veladuras, por su parte, consisten en la combinación del color de distintas capas de pintura. Para ello se puede usar betún de Judea y barniz, o solo barniz pero mezclado con aceite o con agua, para lograr distintas tonalidades. Esta técnica permite simular la superficie de otros tipos de madera, y la variedad de resultados está solo limitada por la creatividad del decorador.