Aunque la fecha oficial fue el sábado 1 de diciembre, día en el que las entidades bancarias casi no operan, será a partir de hoy lunes cuando los comerciantes españoles podrán comenzar a retirar monedas y billetes de euro de estas oficinas. Arranca así, otra etapa esencial en el tránsito a la moneda única: la predistribución a las compañías y establecimientos comerciales que van a entrar en contacto directo con el público.
El comerciante tendrá que firmar un contrato con la entidad de crédito y comprometerse a no poner en circulación la nueva moneda antes del uno de enero próximo, y guardarla en lugar seguro si quiere obtener monedas y billetes en cuantía superior a los 1.000 euros (166.386 pesetas) desde el comienzo de este último mes del año.
Si dispone en su cuenta de la cantidad que retira, no va a precisar de aval ni otra garantía. La operación le saldrá gratis, porque bancos, cajas de ahorro y cooperativas de crédito han anunciado que solamente cobrarán las comisiones correspondientes al establecimiento de garantías o coberturas, si fueran precisas.
El apunte en cuenta se llevará a cabo con valor del 15 de enero, e incluso en fecha posterior, si así lo acuerdan las partes. Es un aliciente para que los comercios colaboren. De este modo, los comerciantes van a seguir cobrando por un tiempo los intereses correspondientes a las cantidades retiradas según la remuneración que tuviesen pactada.
Grandes tareas
Sobre los comerciantes pesa una de las grandes tareas de la implantación del euro, ya que se han comprometido a devolver el cambio en euros, desde la madrugada del 1 de enero de 2002, siempre que les resulte posible. También corre a su cargo la no menos laboriosa función de retirada de las pesetas, que irán a parar al Banco de España, para su destrucción otra vez por la vía de las entidades bancarias.
Las sucursales de bancos, cajas de ahorros y cooperativas ya han recibido buena parte del stock básico para atender estas demandas. Las tiendas que retiren la nueva moneda por importe inferior a 1.000 euros y los consumidores que vayamos a obtener euromonederos (por importe equivalente a 2.000 pesetas, 12,02 euros) tendremos que esperar hasta el 15 de diciembre para realizar nuestras demandas.
Cada entidad de crédito ha recibido un número determinado de unidades básicas de distribución (UMA). En las UMAS hay proporciones exactas de las 7 piezas metálicas del euro por un valor de 9.525 euros, un poco más del millón y medio de pesetas. Las agencias bancarias de mayor tamaño o actividad han obtenido hasta cinco UMAS, hasta un total de 97.000.
También las grandes superficies de distribución cuentan con su «euromonedero», que en este caso alcanza un valor de 30, 41 euros, 5.020 pesetas y que servirá como entrega inicial de moneda metálica para cada una de las cajas registradoras. Se han producido tres millones y medio de estos euromonederos destinados al comercio, que las empresas ya pueden retirar de bancos y cajas.
Las grandes superficies van a obtener euros en cantidades adicionales. Sumadas a los euromonederos del sector, significa que recibirán un 15% del stock de lanzamiento, que alcanza un total de 6.525 millones de monedas (por valor de 1.634 millones de euros) y 1.675 millones de billetes (60.000 millones de euros).