Las faltas de ortografía son una preocupación para la mayoría de quienes han de escribir un texto y, sobre todo, para quienes han de presentarlo ante terceras personas. Por ello es frecuente revisarlo antes de entregar y recurrir para esta tarea a un corrector de ortografía. Los correctores de procesadores de textos y on line son dos opciones, ¿pero son útiles? En este artículo se enumeran algunos de los correctores on line más importantes, así como los errores frecuentes cometidos por los correctores ortográficos.
Correctores ortográficos de castellano on line
Bien porque no se active la función correctora, porque no se confíe en el corrector del procesador de textos o porque en ese momento no sea posible acceder a él, en ocasiones, los correctores on line son el recurso elegido para confiarles un texto. Hay múltiples opciones, tantas que incluso algunos dan la opción de verificar archivos completos y todos ellos gratis.
- COES. La Universidad Politécnica de Madrid (UPM) y la Universidad Carlos III gestionan este corrector ortográfico de palabras y ficheros.
- Verificador ortográfico. Dispone de cinco millones de palabras, incluidos términos técnicos, aunque se debe utilizar con cautela. Cuenta con «voces propias de todos los países latinoamericanos y de España», por lo que puede dar por válidos términos que no se usen en nuestro país.
- Corrector ortográfico de Google Chrome. Este corrector comprueba de forma automática la ortografía de los formularios web y de los textos.
- MyStylus. Permite detectar frases largas, nombres propios, errores de espaciado y propone palabras alternas a extranjerismos.
- CorrectorOnline. Se puede tanto redactar en su misma interfaz, como pegar un escrito ya creado para que comience a trabajar. Una vez acabe el proceso, subraya todos los posibles errores detectados en distintos colores, y ofrece sugerencias para corregirlos en pocos segundos.
- Otros. Además, cabe mencionar diccionarios on line de gran utilidad como la RAE, donde se puede hacer cualquier consulta sobre la lengua española, así como la Fundación del Español Urgente, Fundeu,
Junto con estos, quienes necesiten comprobar textos escritos en lenguas cooficiales o extranjeras pueden emplear las siguientes herramientas:
- Softcatalà. Este corrector de ortografía es válido para textos en catalán, con opción de formas valencianas. ElCorrector admite, además, opciones en mallorquín.
- XUXEN. Chequea los textos en euskera para detectar los errores ortográficos.
- OrtoGal. Este corrector corrige palabras y textos en gallego.
- SpellCheckPlus es un corrector en inglés, como Reverso, que acepta la ortografía americana y la británica.
- Orangoo y SpellChecker son correctores multilingües que admiten sugerencias en más de veinte idiomas diferentes.
Errores frecuentes de los correctores
Cuando al redactar un texto nos surge una duda, es frecuente consultar un diccionario para resolverla. Del mismo modo, al escribir en un procesador de textos, el corrector ortográfico se utiliza para comprobar si se han cometido faltas de ortografía y conocer los cambios que sugiere. ¿Pero son útiles estos correctores? ¿Aciertan en las revisiones?
En su mayoría, los correctores descubren erratas y contribuyen a presentaciones más correctas, pero hay fallos. Permutación, conmutación, adición u omisión de grafemas, confusión entre mayúsculas y minúsculas, cambios en los nombres escritos en lenguas distintas al castellano o conjugación de verbos errónea. Estos son errores frecuentes de los correctores ortográficos.
Respecto a los idiomas distintos al castellano, se cuenta con correctores en lenguas cooficiales o extranjeras, aunque en este caso el dominio del idioma ha de ser aún mayor para estar seguros de que el término propuesto para sustituir es correcto en ese contexto.
A qué se deben los errores del corrector
Los correctores ortográficos tienen un funcionamiento sencillo. Cuentan con dos diccionarios, uno principal y otro secundario. Esto permite que se comparen las palabras una por una entre ambos y que, cuando se detecten los errores, se resalten o destaquen en color rojo o con una línea de subrayado del mismo tono.
El corrector de ortografía puede pasar por alto palabras que se diferencian en una letra y, aunque son correctas, no se corresponden con el significado buscado
«Si el corrector encuentra la palabra en alguno de los dos diccionarios, la estima correcta. Si no la encuentra, se detiene, considerándola errónea, y ofrece como posible solución una lista de palabras parecidas ortográficamente, con la intención de que el usuario seleccione la idónea», explican Antonio Ariza y Ana María tapia, en el trabajo ‘El corrector ortográfico y la presentación del texto escrito‘.
Es decir, cuando las palabras que escribimos se recogen en ambos diccionarios, se considera que son correctas, si bien esto no significa siempre que las frases tengan sentido. Podemos poner «seto» en lugar de «esto» o «pato» en lugar de «apto» y que el corrector no lo destaque como un error, puesto que estima que la palabra es adecuada.
Otras veces puede ocurrir que el corrector pase por alto palabras que tan solo se diferencian por una letra pero que, del mismo modo, son correctas. Es lo que sucede cuando escribimos «vello», aunque queremos escribir «bello», o «bienes», aunque habíamos pensado escribir la forma verbal «vienes».
Además, cuando se aprueban cambios en la ortografía española, es importante que estos se recojan en las versiones de los diccionarios que se utilizan para garantizar que se aplican las normas vigentes.