Los delegados reunidos en la conferencia de la Convención sobre el Comercio Internacional de Especies de Fauna y Flora Amenazadas de Extinción (CITES), en Bangkok (Tailandia), han acordado imponer límites temporales a la venta de caviar, con el objetivo de frenar el comercio ilegal de este producto.
Así, el caviar procesado este año deberá ser exportado como muy tarde el 31 de marzo de 2005. A partir de 2006, todo el caviar se exportará en el mismo año de su producción, con el fin de evitar que los «stocks» se acumulen de un año para otro.
Además, no se permitirán las reexportaciones de caviar de más de 18 meses. Hasta ahora, los comerciantes ilegales podían declarar fraudulentamente que su caviar había sido procesado en años anteriores, y sortear así las cuotas anuales ya impuestas por la CITES.
Debido a ese vacío legal, se daba también la circunstancia de que los estados productores guardaban parte de la producción de un año para otro. Era entonces cuando salía al mercado el caviar fresco de los furtivos, que alcanzada elevados precios.
La semana pasada, al margen de la CITES, los principales países productores de caviar (Azerbaiyán, Irán, Kazajistán, Rusia y Turkmenistán) acordaron reducir sus cuotas de exportación para «promover pesquerías sostenibles y proporcionar la tan necesaria estabilidad a la industria» de este producto. De esta forma, las cuotas de exportación combinadas de beluga -el más raro y valioso de los esturiones- se han recortado el 50% respecto a las de 2003, mientras que las del esturión sevruga se han reducido en un 40%. En cuanto a las cuotas de caviar de esturión ruso y persa, se han recortado un 10%.