El Reglamento General de Circulación establece que los carriles VAO (vehículos de alta ocupación) solamente podrán ser utilizados por automóviles, motocicletas y vehículos mixtos adaptables destinados exclusivamente al transporte de personas, cuya masa máxima autorizada no exceda de 3.500 kilos y que estén ocupados por el número de personas que se haya fijado en su señalización.
Su utilización está prohibida, por tanto, al resto de vehículos y conjuntos de vehículos, es decir, un automóvil con remolque, bicicletas o ciclomotores no pueden circular por el VAO. Pero hay salvedades importantes:
– Los vehículos mixtos adaptables (furgonetas o todoterrenos destinados al transporte de mercancías que pueden reconvertirse al transporte de personas mediante la instalación temporal o permanente de asientos) podrán circular si efectivamente se dedican principalmente al transporte de personas y esta condición figura expresamente en su clasificación técnica.
– Los vehículos de minusválidos pueden circular aun cuando sólo los ocupen sus conductores, siempre que estén identificados como tales con la señal V-15 que debe figurar tanto en la parte delantera como en la trasera del vehículo.
– Autobuses de más de 3.500 kilos y autobuses articulados: pueden circular independientemente de su número de ocupantes si así se indica en la señalización del carril.
– Vehículos prioritarios: pueden usarlo el carril BUS/VAO todos los vehículos de policía, bomberos, protección civil y atención sanitaria así como los equipos de mantenimiento de instalaciones y de la infraestructura de la vía.
En todo caso, las autoridades locales, autonómicas o de Tráfico podrán permitir, recomendar u ordenar la circulación de otros vehículos por el VAO por razones de seguridad vial o fluidez de la circulación.
Los carriles destinados a vehículos de alta ocupación son una solución para paliar la congestión del tráfico en las grandes ciudades o vías con alta densidad de tráfico y a la vez, fomentan el uso racional del automóvil, al primar a aquellos vehículos que transportan a más personas, con el consiguiente ahorro de combustible.