La inflamación cerebral protege al cerebro del Alzheimer y le ayuda a eliminar las placas amiloides, cuya acumulación en dicho órgano provoca la enfermedad. Ésta es la conclusión de un estudio desarrollado por investigadores del Centro Médico de la Universidad de Rochester (Nueva York). Este hallazgo, afirman, podría contribuir al desarrollo de una vacuna o algún tratamiento contra el mal a través del sistema inmunológico del paciente.
Hasta ahora se creía que la inflamación cerebral causada por alguna lesión o golpe agravaba los síntomas del Alzheimer, que comienza con la pérdida de la memoria, la demencia y termina con la muerte del paciente. Sin embargo, los científicos norteamericanos afirman que en experimentos con ratones determinaron que, en realidad, la inflamación protege al cerebro y elimina las placas amiloides, al menos de forma parcial.
«Este trabajo proporciona pruebas de que bloquear las reacciones inflamatorias en el mal de Alzheimer no es una terapia ideal», señala Solomon Shaftel, neurobiólogo del Centro Médico. «Podría obstaculizar un proceso beneficioso y parte de la reacción del cuerpo en la lucha contra las placas amiloides», afirma.
En cualquier caso, los expertos recuerdan que los experimentos se han realizado con ratones, por lo que hay que ser «muy cautelosos» a la hora de interpretar los resultados de la investigación.