España se expone a una denuncia ante el Tribunal de Justicia de la Unión Europea (UE) si antes de finales de mes no explica de forma convincente a la comisaria de Sociedad de la Información, Viviane Reding, cuál es el motivo de los abusos publicitarios que cometen sus organismos de radiodifusión.
Reding denuncia que las cadenas estatales sobrepasan el límite de 12 minutos de anuncios por hora impuesto por la Ley de Televisión sin Fronteras, y advierte del «desarrollo considerable» de la colocación de productos de marca en los decorados de series o películas, que las televisiones españolas practican actuando más allá de los límites previstos en la normativa.
Una serie de investigaciones realizadas por inspectores independientes entre 2004 y 2006 han puesto en evidencia las «graves» infracciones que «nos hacen dudar del control por parte de España de la aplicación de la ley», dijo la comisaria.
La advertencia de Bruselas coincide con uno de los momentos clave en la evolución de la actual directiva de Televisión sin Fronteras, nacida en 1989 y sometida ahora a una revisión que pretende modernizarla para adaptarla a la evolución tecnológica y los servicios audiovisuales emergentes. La nueva ley será votada a finales de este año y está previsto que entre en vigor en 2009 con el nombre de Audiovisual sin Fronteras. Aunque mantendrá la base del texto actual, introducirá cambios significativos en materia de publicidad.