Las agendas electrónicas pierden terreno en favor de los móviles de última generación: empresas como Palm, HP o Dell están cediendo cuota de mercado, mientras que los fabricantes de teléfonos inteligentes como RIM (con Blackberry), Nokia (con su serie N90) y Apple (con iPhone) ocupan su nicho y hacen sus funciones. ¿Qué futuro les espera?
Los dispositivos PDA (Asistente Digital personal) son ordenadores de mano que se inventaron en su momento para ser utilizados en movilidad. Esos dispositivos nacieron de la evolución de las primeras agendas electrónicas y en poco tiempo fueron añadiendo otras funcionalidades como gestión de aplicaciones ofimáticas, visualización de contenido multimedia, navegación por Internet, correo electrónico y finalmente funciones de teléfono.
Imagen: Palm
Durante años fueron lo más avanzado en tecnología móvil y todos los expertos presumían de poseer una agenda PDA. Sin embargo, no llegaron a salir de este segmento elitista, por lo que fueron languideciendo mientras el teléfono móvil crecía en usuarios y en funciones, convirtiéndose poco a poco en su equivalente popular y, por lo tanto, más rentable comercialmente. A día de hoy no son pocos los teléfonos que se acercan en funcionalidad a las mejores PDA. Sin embargo, a las empresas que las fabrican todavía les queda un margen para mantenerse en el sector, apuntándose a la telefonía en movilidad y la conectividad 3G.
La hora de los smartphones
El fuerte auge de los smartphones (teléfonos inteligentes) ha apartado a las PDA convencionales de las preferencias de los usuarios, sobre todo en el sector profesional, donde el mercado está actualmente liderado por el fabricante RIM, con la Blackberry, y en los últimos meses se ha situado en una buena posición el iPhone, el teléfono inteligente de Apple que funciona con una versión del sistema operativo MAC OS X.
Ahora que el iPhone se impone mediáticamente, resulta curioso recordar que la primigenia agenda electrónica como tal también la presentó Apple: la primera mención a los dispositivos PDA tuvo lugar con la presentación en 1992 deApple Newton, una PDA lanzada por Apple que fue un fiasco en el mercado a pesar de contar con avances destacables como una pantalla táctil o reconocimiento de escritura por voz y un procesador RISC ARM 610; un chip con una capacidad de proceso muy superior a otros procesadores usados en esa época.
El fracaso se debió al poco mercado existente en ese momento, ya que muy poca gente demandaba entonces un dispositivo de estas características. En 1998, con Apple al borde de la bancarrota y con la entrada de nuevo en la empresa de Steve Jobs, el Apple Newton dejó de comercializarse.
Palm se resiste a perder mercado
Los tiempos han cambiado mucho y muy rápido y actualmente, según datos de la consultora GFK para Telefónica, el iPhone de Apple representa ya el 50% de los dispositivos PDA que se venden en España. Una cifra conseguida con la salida al mercado español del modelo 3G mediante un acuerdo de exclusividad con la operadora Telefónica.
Este segmento, según la misma consultora, está compuesto por smartphones como el citado iPhone o la Blackberry, pero también gozan de cierta reputación todavía las agendas electrónicas con el sistema operativo Windows Mobile, el sistema Palm y las de HP. De hecho, Palm se resiste a perder su mercado y está dispuesta a luchar con productos convergentes hacia la telefonía y la conectividad 3G.
Imagen: Palm
Nacida en 1995, la empresa Palm es el principal fabricante de agendas electrónicas PDA, siendo una de las empresas responsables de la fama y desarrollo de estos dispositivos, con modelos legendarios como la Palm Pilot y la serie Tungsten. Parte de este éxito fue debido al sistema operativo de Palm OS, abandonado y posteriormente retomado por la compañía, porque se trata de un sistema, muy en consonancia con los tiempos actuales, para el cual existen miles de aplicaciones gratuitas y comerciales desarrolladas por terceros.
Una serie de errores comerciales, y una fuerte competencia, han situado a la compañía en un puesto menor en el sector. Además, el desarrollo del sistema operativo Windows Mobile para las agendas PDA, y su compatibilidad exclusiva con las aplicaciones ofimáticas de Microsoft, fueron algunas de las principales razones por las cuales el segmento profesional fue abandonando paulatinamente la utilización de dispositivos de la marca Palm.
Para volver a ser una marca competitiva, Palm ha tenido que recortar su plantilla: lleva más de un año despidiendo a trabajadores. A la salida, el año pasado, de 250 personas se han unido en noviembre de este año 200 personas más, dejando la fuerza laboral de la empresa en una cifra inferior a los 1.000 empleados.
Nuevo sistema operativo
Imagen: PalmActualmente, Palm dispone de dos teléfonos inteligentes con los que competir y tratar de recuperar su posición: Centroy Treo. Y aunque le dan una cuota de mercado muy inferior a la mantenida hace algunos años, suponen el 90% de la facturación total, razón por la cual la empresa quiere centrarse en estos dispositivos.
La compañía tiene previsto lanzar un nuevo sistema operativo, denominado Nova y basado en Linux, en los próximos meses, así como un dispositivo que utilizará Nova en la segunda mitad de 2009. El objetivo es competir con iPhone, Blackberry y Android, la plataforma operativa para móviles de Google. Además, Palm ha parado el desarrollo de otras ideas como Foleo, un ordenador portátil pensado para ser un acompañante del teléfono móvil.