El invierno es sinónimo de planes caseros, platos calientes y adornos navideños que son desempolvados tras un año de letargo. Pero si hay una idea que puede resumir bien la estación invernal es el frío. Las temperaturas bajan y obligan a rescatar del armario abrigos, gorros de lana y bufandas. Pero, en esta época también la tecnología puede ayudar a organizar planes al aire libre y a defenderse del frío. Este artículo recoge cinco recursos tecnológicos para lograrlo: desde ropa con USB para frioleros hasta aplicaciones para protegerse de los resfriados.
1. Prendas inteligentes para los frioleros
Cada estación requiere una indumentaria concreta. En el caso de la temporada invernal, los protagonistas son las prendas y los complementos de abrigo, además de accesorios como los paraguas y los chubasqueros, que ayudan a guarecerse de las inclemencias del tiempo. Pero… ¿y si esta ropa aportara una dosis de calor extra?
Los avances tecnológicos han hecho que esto sea posible con la implementación de prendas USB, que van desde guantes hasta calcetines y medias. El funcionamiento es muy sencillo: a través de su conexión USB, la ropa en cuestión comienza a calentarse cuando su dueño lo desea.
Existe una amplia gama de prendas calefactables idóneas para salir a la calle protegidos del frío. Incluso, ya no es necesario quitarse los guantes para utilizar el móvil, puesto que cada vez hay más complementos que permiten el uso de dispositivos táctiles.
2. Gadgets contra el frío
Muchos deportistas aprovechan las condiciones climatológicas propias del invierno para practicar deportes de nieve como esquí y snowboard, además de otros más tradicionales y comunes en todo el año como el ciclismo o el running. Pero es importante estar protegido contra el frío y, en este sentido, la ropa elegida juega de nuevo un papel muy importante. La tecnología pone a la disposición de los amantes del deporte prendas especiales con tejidos aislantes, sistemas de ventilación y controles de reproducción integrados.
¿Y qué pasa en la oficina? El frío puede ser todo un inconveniente para trabajar a gusto. ¿Qué opciones, además de la calefacción, pueden ayudar a combatirlo? La tecnología USB llega al auxilio de más de un friolero. Por ejemplo, existen calentadores de manos que emiten energía calorífica a la zona pero, a la vez, permiten al portador usar los dedos. De esta forma, es posible teclear en el ordenador o realizar otras actividades con total normalidad ¡y con las manos calientes!
Otro de los grandes inventos para no sucumbir al invierno en el trabajo son los ratones con función calor. Este gadget irradia calor desde su parte superior, llegando a alcanzar temperaturas superiores a los 40 ºC. Y, ¿qué mejor contra el frío que un buen café? En este aspecto, hay posa-tazas electrónicos que ayudan a mantener las bebidas calientes con solo conectarse a un puerto USB.
3. Domótica antiglacial
Las viviendas actuales poco tienen que ver ya con las de hace algunas décadas. La digitalización ha entrado de lleno en los hogares, propiciando así el desarrollo de casas inteligentes donde el usuario controla las distintas funcionalidades y servicios.
En este sentido, es posible controlar la temperatura de la vivienda desde el smartphone, ajustando la estancia a las necesidades de cada momento. Además de constituir un ambiente más acogedor, otro beneficio importante es que se fomenta el ahorro en el consumo de energía.
4. Televisión inteligente
La forma de ver la televisión está cambiando. Netflix, HBO, Movistar Plus… Cada vez hay más plataformas que siguen la filosofía del vídeo por demanda y permiten elegir qué contenidos ver en cada momento.
Los dispositivos también se adaptan a esta moda y los televisores inteligentes cuentan con multitud de posibilidades de visionado. Esto demuestra que quedarse en casa no tiene por qué ser un mal plan, sobre todo cuando uno puede resguardarse del frío viendo sus películas y series preferidas.
5. Apps ardientes
Por último, un arma muy poderosa para combatir el frío puede ser el propio móvil. ¿Cómo? A través de apps que hacen la vida más fácil cuando las temperaturas bajan. ¿En qué pueden ayudar estas aplicaciones?
Los cambios de temperatura hacen que, en ocasiones, uno no sepa qué ropa ponerse. La app Whatoweather combina meteorología y moda para recomendar el conjunto idóneo según la temperatura, la humedad o el riesgo de precipitaciones, entre otros.
Pero hay veces en que ni las prendas de vestir pueden evitar que el frío haga mella en la salud. Aplicaciones como Everyday Health ayudan a pasar mejor los resfriados invernales con consejos de lo más variados.
A estas apps hay que sumar otras diseñadas para practicar deportes de invierno o para preparar recetas calientes. Definitivamente, la tecnología hace que el frío deje de ser una excusa para disfrutar del invierno.