Buena parte de los gastos que conforman la cuesta de septiembre se han tenido que afrontar en los meses previos o, como muy tarde, esta primera semana. Así que si no se han tomado medidas durante este verano y la economía doméstica no está para muchos movimientos, toca abrocharse el cinturón y comenzar a cambiar ciertos hábitos que hagan factible sobrevivir a la vuelta al trabajo y, en el caso de haya niños en casa, a la vuelta del cole. En este artículo se proponen ideas para afrontar y compensar los gastos de septiembre, los más elevados de los últimos años debido a la alta inflación.
Septiembre, un mes cuesta arriba de gastos
Septiembre es duro para las familias. Lo es para quien vive solo, pues los gastos domésticos no se comparten, y son muchos y, además este año, resultan más caros: hipoteca (o alquiler), cesta de la compra, combustible, suministros (luz, agua, gas, telefonía), ropa…
Pero sobre todo este mes es una rampa económica que roza lo perpendicular para quienes tienen hijos, y más para las familias monoparentales y quienes se encargan de tres peques o más (familias numerosas). El regreso a las aulas de los niños siempre supone un gasto extra muy difícil de afrontar, y este curso 2023-24 no podía ser menos.
➡️ Gastos de la vuelta al cole
Estamos ante «la vuelta al cole más cara de la historia». Entre las estimaciones más económicas destaca las del estudio elaborado por el comparador financiero Banqmi: este curso escolar supondrá un desembolso familiar de hasta 410,71 euros de media por alumno, un 10,5 % más que antes de la pandemia. Por tanto, para la tradicional vuelta a las clases, el bolsillo deberá hacer sitio a entre 400 y 1.300 euros de media por niño.
Los desembolsos básicos, según el comparador de precios Idealo, incluyen al menos mochila (30 euros), zapatillas (32), chándal (30), libros de texto (310) y material escolar (48). A ello hay que añadir a veces otra compra, la del uniforme (150). Y, además, cada año hay que acoquinar con la matrícula y la cuota de la asociación de madres y padres (30). El grueso del gasto anual está en los libros de texto —el mayor de Europa—, y aunque los libros digitales cuesten la mitad, mientras las cuotas para sufragar el ordenador portátil son un ‘suma y sigue’.
Durante el curso hay otros desembolsos cada mes. Algunos son casi obligatorios: cuota escolar/aportaciones voluntarias y excursiones. Y otros lo son según las circunstancias familiares: comedor, transporte y actividades extraescolares. Y hasta en algunos centros hay otros «copagos ilegales» al principio de curso para pagar la luz, el agua, el papel higiénico o a personal que se encargue de las necesidades higiénicas del alumnado.
➡️ Gastos de la vuelta al trabajo
Y, por si fueran poco estos dispendios, los adultos también tienen sus propias «mensualidades extralaborales» de inicio de curso: el gimnasio, el curso de inglés, la clase de zumba o el taller de dibujo, por ejemplo.
Pero, además, empezar septiembre supone retornar al trabajo y sumergirse en un mar de gastos donde el transporte y las comidas fuera de casa, principalmente, acaparan parte del presupuesto doméstico asociado al empleo.
Qué medidas de ahorro tomar a partir de septiembre
1. Convertir a los niños en superahorradores
La vuelta al cole puede ser el momento idóneo para hacer que los hijos tomen en cuenta de la importancia del consumo responsable, el ahorro y el verdadero valor del dinero. ¿Cómo?
- ✅ Una idea para enseñarles a ahorrar, aunque parezca descabellada, es llevar a los niños a comprar el material escolar. Habrá que armarse de paciencia, dejar que hagan una lista de lo que necesitan, una vez visto lo que hay en casa, y ceñirse a ella. Con ello sabrán diferenciar entre necesidad y deseo y reutilizar y no despilfarrar.
- ✅ Las marcas y los caprichos de moda se pueden gestionar así: fijar un presupuesto para lo básico y el resto, que lo abonen de su propio bolsillo con sus ahorros, pagas o trabajitos que se les encomienden. Esto servirá para que aprendan a ganarse las cosas y, de paso, no salirse del presupuesto fijado.
- ✅ Por supuesto, los padres deben dar ejemplo al inculcar hábitos de ahorro. No desperdiciar agua al cepillarse los dientes, apagar las luces, aprovechar los restos de comida, reciclar los residuos, darle una nueva vida a algo viejo o roto y no hacerse con ropa o tecnología sin necesidad son algunas fórmulas.
2. Comer en casa, de táper o con beca comedor
Si se vive cerca del cole, y hay posibilidades, lo más económico y saludable es comer en casa. En algunos centros escolares, se puede llevar el táper con comida casera. Preguntarlo no está de más. Si no, en cuanto se abra el plazo para solicitar las becas de comedor, apuntarse.
La misma pauta vale para los adultos. Comer fuera a diario puede suponer un gran desembolso económico, y no a todos les abonan dietas por ello en el trabajo. Así que comer de táper será un buen método para ahorrar y alimentarse de forma saludable.
3. Tomar un transporte más sostenible
Lo más conveniente es ir andando al cole o ir al trabajo en bici, o al revés. Es bueno para el bolsillo, pero, sobre todo, para la salud. Pero si no queda más remedio, los niños tendrán que acudir en transporte escolar y los adultos en su propio vehículo.
Pero, y ¿hacerlo en transporte público? Los abonos mensuales son muy económicos, y más en el caso de las familias numerosas. Ten en cuenta que, además, por ahora hasta fin del 2023, los viajes frecuentes en tren, metro, tranvía y autobús están subvencionados; muchos de tus trayectos habituales puedes hacerlos gratis o con grandes descuentos.
Otra posibilidad es ponerse de acuerdo con otros padres o compañeros y organizar un sistema para compartir coche. Los gastos de cuotas, carburante, autopistas y mantenimiento del automóvil bajarán bastante.
4. Acertar con las actividades extraescolares
Son muy positivas, pero las excursiones escolares y las actividades extraescolares a veces desbaratan la economía doméstica. Aun así, no hay por qué renunciar a ellas. ¿Cómo?
- ✅ Actividades complementarias. No ir al zoo o al teatro con los compañeros de colegio es la solución más radical. Estas salidas se avisan a comienzo de curso y suelen estar subvencionadas por las AMPA, por lo que conviene ser previsor y ahorrar para que los niños puedan ir a las más importantes. Basta con aprovechar su cumpleaños, el Ratón Pérez o los Reyes Magos para sufragarlas.
- ✅ Actividades extraescolares. Si el presupuesto no da para este tipo de actividades, ten en cuenta que jugar a fútbol o baloncesto en el patio o la plaza del barrio, nadar en las piscinas municipales y dar a la raqueta en el frontón también es actividad física. Las escuelas oficiales de idiomas o el conservatorio municipal resultan más baratos que los centros privados, así como los cursos culturales (teatro, pintura…) que programan los ayuntamientos.
Además, los adultos pueden disfrutar de otras formas de ahorro en este sentido. Destacan:
- ✅ el aprendizaje de otras lenguas gracias a Internet, YouTube, inteligencias artificiales (IA) como ChatGPT y las aplicaciones móviles, como sugiere nuestro artículo ‘Siete formas de usar la tecnología para aprender inglés‘.
- ✅ la formación continua con los cursos MOOC (Cursos Masivos Abiertos Online), que son gratuitos.
5. Hacer planes, comer, conseguir cosas… gratis, o casi
Groupalia o Groupon son conocidas compañías online de ofertas de ocio local, viajes, servicios y productos. Pero hay otras páginas webs e iniciativas con las que disfrutar del tiempo libre sin apenas gastar.
- ⭐ ¿Ir a ver una peli de estreno en un cine por 3,5 euros o menos? No hay más que apuntarse en la Fiesta del Cine y enterarse de dónde y cuándo será la siguiente. Los mayores de 65 años, en cambio, pueden hasta fin de año ir al cine un día a la semana (suele ser el martes) por solo 2 euros. Y los jóvenes de 18 años cuando quieran gratis hasta que se acabe lo asignado en su Bono Cultural Joven.
- ⭐ Charlas, talleres, video fórums, visitas guiadas… casi siempre son otras actividades culturales gratuitas o de bajo coste organizadas desde las casas de cultura municipales. Muy moda están los ‘free tours’ para conocer las ciudades: son guías turísticos que piden la voluntad por sus servicios.
- ⭐ Para comer gratis o casi, con solo visitar la página web y descargar la aplicación del restaurante preferido o seguirle en redes sociales, se pueden acceder a cupones descuentos, promociones e invitaciones. En ocasiones, por cumplir años o ir con niños, ya regalan comidas. Por ser un mystery shopper (cliente o comprador misterioso que se encarga de supervisar de incógnito el funcionamiento de un establecimiento), lo compensan con menús gratis. Y no hay como asistir a inauguraciones de tiendas o degustaciones de las fiestas patronales.
Por último, si se necesita con urgencia un electrodoméstico o un mueble, y no se contaba con este gasto, se puede recurrir a portales como Nolotiro.org, Freecycle.org o Telodoygratis.com, y dar con lo que uno busca gratis.
- Más páginas web donde puedes conseguir cosas gratis: libros, ropa infantil, colonias…