Mientras el texto y el vídeo se extienden por la Red a la velocidad de la luz, los archivos de audio quedan como la gran asignatura pendiente. ¿Por qué escuchamos tan pocos documentos en audio y en cambio leemos y miramos tantos vídeos on line? Nadie ha sabido responder muy bien a esta pregunta, pero con la llegada del “podcasting”, el equivalente sonoro de los blogs, puede ser la respuesta. Un podcast es un sitio web que alberga un archivo sonoro similar a un programa de radio y que se puede descargar para escuchar tanto en un ordenador como en teléfonos móviles o reproductores de MP3. Aparecieron en el verano de 2004 y poco a poco se han ido haciendo populares entre los internautas hasta convertirse en un formato habitual en los sitios web de las principales cadenas de radio. El periodista José Antonio Gelado, uno de los prioneros mundiales del género, introdujo el “podcasting” en nuestro idioma en octubre de 2004, con sitios que ahora ya son legendarios, como Gisando.org o Comunicando.org. Gelado ha sido analista de videojuegos en la cadena SER, redactor jefe de la revista web tecnológica Referenta y es colaborador habitual de CONSUMER EROSKI.
Estaba buscando una forma de distribuir audio y en el verano de 2004, en algunos blogs de Estados Unidos, hablaban de sindicar archivos de audio junto a los RSS de los blogs. Investigando un poco más aprendí qué era eso del “podcasting” y quién lo estaba usando. No habría más de 100 personas en todo el mundo, ya que no teníamos ni programas para generarlo ni los oyentes para recibirlo. Al principio era una labor artesanal que daba errores muy a menudo, pero ya se veía el potencial que podía tener.
“Estamos en el momento en que surgen más podcasts cada día y los estudios de audiencias indican que sigue creciendo el número de usuarios”El primero fue el de Adam Curry, por las referencias que encontré, luego el de Dave Winer y poco a poco fui descubriendo más, como el de IT Conversations y otros, pero todos en inglés en aquel momento. Tal vez eso fue lo que más me animó a intentar hacerlo en español, pero desde la perspectiva que ya tenía de mis años de profesional de la radio. Así fue como empezó mi blog Comunicando unos meses después.
Se podría decir que la situación actual es la más favorable de todos estos años. Estamos en un momento en que surgen más podcasts cada día y los estudios de audiencias indican que sigue creciendo el número de usuarios en los distintos países. Además, desde mediados de 2008 hay una gran entrada en escena de nuevos blogueros que se lanzan a hacer un podcast. También se nota un mayor interés por el “podcasting” desde los medios de comunicación, y están apareciendo proyectos muy interesantes centrados en audio y “podcasting” como iVoox, que auguran una buena época para el sector.
“Desde mediados de 2008 hay una gran entrada en escena de nuevos blogueros que se lanzan a hacer un podcast”
La evolución ha sido siempre ascendente y con momentos importantes, como fue el día en que Apple incorporó la posibilidad de gestionar podcast al programa iTunes, o la aparición de artículos sobre el tema en los medios generalistas. También fue muy importante el día de la adopción del “podcasting” por parte de emisoras de radio, que han dado mucha visibilidad al fenómeno. En noviembre de 2006 había unos 500 podcasts en español y actualmente estamos por encima de los 1.000
Podríamos decir que en casi todos en los que hay una suficiente penetración de Internet, pero sobre todo en países anglófonos. En español, que es la parte que conozco un poco mejor, triunfa en Estados Unidos, México y España. En otros países lo hace en distinta medida, a juzgar por los estudios y encuestas publicadas. No obstante, todavía hay que analizar mejor las audiencias en España para conocer la realidad, que probablemente sea superior al 20 o 30% de los usuarios conectados.
Creo que es una cuestión de educación y difusión de los medios. El blog ha sido el protagonista y gracias a él también se han dado a conocer el audio y el vídeo. El problema es que incluso algunos podcasts no se atreven a denominarse como tales y recurren al término blog o a otros términos para darse a conocer. Y yo creo que un podcast no es un blog. En cuando al vídeo, creo que se ha abrazado de forma casi irracional, y a cualquier sitio con dos o tres vídeos -aunque sean de baja calidad y pobres en contenido- se le otorga la denominación “.TV” [haciendo referencia a un hipotético movimiento de televisión en Internet], mientras que con el audio tal vez se sea más exigente. Creo que el “podcasting” lleva una línea aparentemente más lenta pero más sólida, y todavía no ha llegado a una mayor difusión. Aún tiene mucho que crecer tanto en producción como en audiencia.
El vídeo requiere manejar dos niveles, el visual y el del audio, mientras que el podcast solo requiere audio. Por tanto en teoría el vídeo es más difícil. Creo que el podcast es bastante sencillo, pero hay un freno como es la propia voz del “podcaster”, ya que para los que se ponen por primera vez delante de un micro requiere acostumbrase a la propia voz grabada. Otro hecho que puede dificultar la grabación de un podcast es la preparación anterior y el proceso posterior a la grabación, que exigen más tiempo que un blog, por ejemplo.
Creo que es un problema de difusión y de aceptación del término más que de calidad e inmediatez. No hay que olvidar que desde hace varios años hay más podcasts que emisoras de radio en el mundo y que la audiencia ya supone entre un 20% y un 30% de los usuarios de Internet según los estudios en distintos países.
“La audiencia ya supone entre un 20% y un 30% de los usuarios de Internet, según los estudios en distintos países”
Me gustaría relanzar el podcast de Guisando.org [posiblemente el primer podcast del mundo versado en recetas de cocina que dejó de funcionar como tal hace unos años pero sigue en versión de texto] porque era algo que no tenía nada que ver con tecnología y mi papel era secundario en él, ya que era como un invitado.
Sólo lo sacaríamos si encontráramos una voz que encajara con el podcast y la filosofía que tenía de contar las recetas de forma sencilla. Las imágenes las tenemos en la web, es decir se puede leer, se puede ver y escuchar la receta, y si te animas a hacerla puedes encontrar en Guisando.org todas las fotos de los platos. Pero si te refieres a explorar otras formas de contar recetas, ya estamos admitiendo desde hace muchos meses las recetas en vídeo que los lectores nos envían.
Creo que sí, porque precisamente es una de las bazas del “podcasting” frente a otros medios; el permitir su consumo fuera del ordenador y en cualquier tipo de dispositivo. Un buen ejemplo es el iPhone, que con su reciente actualización ya permite la descarga de podcasts sin pasar por un ordenador.
“Lo normal es que el “podcasting” se convierta en una forma más de acceder a contenidos en cualquier lugar, con las ventajas de la radio tradicional”Los datos indican que en términos generales, la escucha en el ordenador es la más utilizada, seguida de la descarga también en el ordenador. Si se barata el acceso y se facilita la descarga y gestión desde este tipo de dispositivos, lo normal es que el “podcasting” se convierta en una forma más de acceder a contenidos en cualquier lugar, con las ventajas que tenía la radio tradicional de permitir hacer otras cosas mientras se escuchaba.
De momento no tenemos en la comunidad de “podcasters” ninguna denuncia o queja por este tema en España. En parte también puede ser debido a que muchos “podcasters” usamos música que permite expresamente su reproducción en podcasts y que se acogen a licencias como Creative Commons o Coloriuris.
Si, sin duda. Es una de las asignaturas pendientes de la radio y de los creadores de audio, que todavía no se han tomado Internet tan en serio como se requiere. Afortunadamente, cada vez se están haciendo más cosas. Hay iniciativas muy interesantes como iVoox, que hacen que sea más fácil consumir audio de la misma forma que se consume vídeo on line. También es mayor la cultura del audio on line que facilita la aparición de más podcasts, redes de podcasts y empresas relacionadas con el audio.
Creo que es la mejor red social de música del momento, una de mis preferidas, y es mucho más que una emisora o un hilo musical. Es una herramienta de compartir, descubrir y escuchar música, y el punto de encuentro de los aficionados a todos los estilos y artistas. Además, su capacidad de integración en reproductores de música y dispositivos móviles permite a los usuarios llevarse la música a cualquier lugar.
Me gusta y es uno de los descubrimientos de 2008. Es una forma sencilla de invitar a los seguidores de una persona a escuchar una canción. La pega que le pondría ahora mismo es que todavía dispone de una base de temas un poco limitada y tiene mucho que crecer aún. Es un modelo interesante al que hay que seguir la pista.