España se sitúa entre los países de la Unión Europea que más envases recicla, con un 60%, aunque todavía queda trabajo por realizar. Por ejemplo, el 25% de los residuos que se depositan en el contenedor amarillo no debería ir al mismo, entre un 15% y un 20% de la población no recicla, y un 10% de los envases del mercado son fraudulentos porque corresponden a empresas que no cumplen la ley. Son algunos de los datos que ofrece Antonio Barrón (León, 1954), director de Empresas Adheridas y Comunicación de Ecoembes, la sociedad privada sin ánimo de lucro que gestiona la recogida y reciclado de los envases ligeros de plástico y de papel y cartón en España. Para mejorar estas cifras, Barrón considera fundamental la concienciación de los consumidores, porque la suma de los pequeños esfuerzos de todos permite lograr un gran resultado, subraya.
Los envases reciclados en España llenarían 100 grandes estadios de fútbol a rebosarEn la actualidad en torno a 1.250.000 toneladas: llenarían 100 grandes estadios de fútbol a rebosar.
Estamos bien: cumplimos con los objetivos de la normativa comunitaria -muchos de los Estados miembros no los cumplen-. Para 2008, la directiva de la UE marca un 55% de reciclado mínimo, y España va a terminar con un 60%. No somos los primeros, porque hay países como Austria, Bélgica y Alemania que se encuentran por delante, pero estamos entre los países de cabeza, casi igual que Francia.
El 25% de las cosas que se echan al contenedor amarillo no deberían ir ahíLas que más reciclan se encuentran en la parte norte: País Vasco, La Rioja, Navarra y Cataluña. No nos gusta decir las que menos reciclan porque tienen otras prioridades económicas, han empezado más tarde, etc. Luego hay experiencias concretas de ayuntamientos que lo hacen genial en comunidades que no lo hacen tan bien, como por ejemplo Córdoba, que ya hacía recogida selectiva antes de la aparición de Ecoembes.
Desde un punto de vista de la calidad, se debe a errores de los ciudadanos o por desidia. En España, el 25% de las cosas que se echan al contenedor amarillo son lo que denominamos “impropios”, es decir, no deberían ir ahí; muchas veces se depositan con la mejor intención, pero de forma equivocada.
En cuanto a la cantidad, hay un porcentaje de ciudadanos que son refractarios o que no tienen conciencia social o medioambiental, y no reciclan. En España estas personas pueden estar entre un 15% y un 20% de la población, y es muy difícil o casi imposible convencerlas. El trabajo hay que hacerlo a largo plazo, en los colegios, con los niños, que crecerán con una educación ambiental y un hábito ya adquirido.
Entre un 15% y un 20% de la población no recicla y es muy difícil o casi imposible de convencerHay muchos tipos de envases, pero el ciudadano no se tiene que agobiar por ello. En general, hay que seguir la norma básica: si es un envase, al contenedor amarillo, porque en el 98-99% de los casos se va a acertar. Hay que recordar que al contenedor amarillo van sólo los envases, no el plástico en general. Un error bastante frecuente, que se ha ido corrigiendo, era echar los bricks al contenedor azul de papel, cuando en realidad tienen que ir al amarillo, porque además de cartón tienen un porcentaje sensible de plástico y metal. Luego hay que echar los envases vacíos, pero no es necesario lavarlos, porque además de que se consume agua, en las plantas de reciclaje ya se limpian.
El mensaje es que no piensen que su pequeño gesto diario no va a ayudar al medio ambiente, ya que es cosa de todos y muchos pocos hacen un mucho. Una lata diaria al año son 365, multiplicadas por los millones de ciudadanos que pueden reciclar hacen millones de latas. Y como consejo práctico, que piensen en cómo pueden en sus casas organizar la separación de los residuos. En lugar de tenerlo todo en un mismo sitio, se pueden tener bolsas más pequeñas, o cubos compartimentados. Si hay voluntad, el esfuerzo no es tan grande.
Al contenedor amarillo van sólo los envases, no el plástico en generalEn este momento no es una cuestión de infraestructuras, porque ya hay suficientes. Yo insistiría en la educación, comunicación y sensibilización, ya que hay ciudadanos que no ven las ventajas medioambientales de reciclar o es la coartada que ponen para no hacerlo. Luego hay países de la UE, como Bélgica, donde ponen multas al consumidor que detectan que no recicla o lo hace mal.
No. Para empezar, en España estamos en un índice bueno de reciclaje. Todo lo que sea subir del 60-65% es más difícil.
Un sistema de multas no sería conveniente en EspañaHay un borrador de una ordenanza, y de ahí a que salga hay todavía un trecho. Pero nosotros no entramos en ello, no lo fomentamos.
Según nuestros datos, se reciclan en España 24 millones de residuos sólidos urbanos (RSU). De este total, ocho millones son envases, de los que la mitad son domésticos y la otra mitad comerciales e industriales. Algunas entidades no mezclan bien los conceptos cuando hacen sus estadísticas, o se refieren a otros datos. Las cifras que Ecoembes da son objetivas y medibles, con un margen de error pequeñísimo, y se refieren a las toneladas que las empresas nos declaran y nosotros gestionamos. Lo nuestro son habas contadas: hay 12.400 empresas que nos declaran aproximadamente 2.100.000 toneladas de envases, tanto del contenedor azul como del amarillo.
Por otra parte, las cifras de toneladas que se han reciclado nos las dan los municipios y los ayuntamientos, contrastadas, doblemente auditadas y de consulta abierta. Por nuestra propia personalidad de empresa privada, pero con un servicio casi público y trabajando con las administraciones, tenemos que ser tremendamente transparentes.
En España se reciclan 24 millones de residuos sólidos urbanosSí, tenemos buena relación con ellos. Les explicamos que se trataba de un error conceptual, y aunque no nos dieron la razón al 100%, sí corrigieron de forma drástica sus estadísticas.
Así es, aproximadamente un 10% de los envases que se ponen en el mercado corresponden a empresas que no cumplen con la ley. No declaran los envases que ponen en el mercado y ni se adhieren a nuestro sistema ni ponen su propio sistema de recuperación. Nosotros perseguimos ese fraude, porque tenemos que defender a nuestras empresas de esa competencia desleal. No es por tanto un fraude del sistema, que es riguroso y hasta egoísta, porque cualquier error podría significar su propio fin.
Todos los años detectamos de 100 a 200 empresas que no cumplen con la leyHacemos investigación de campo. Hay una empresa que va a las tiendas y mira unas 15.000 referencias al año que luego se cruzan con nuestras bases de datos. Todos los años detectamos entre unas 100 y 200 empresas que no cumplen con la ley. El primer paso es informarles de los requisitos legales, porque pudiera ser que no los conocieran. Suelen ser empresas pequeñas, porque todas las grandes cumplen con sus obligaciones legales. Luego muchas de esas empresas se adhieren, y las que finalmente no lo hacen son denunciadas en su comunidad autónoma, que les pasa una inspección, y si se confirma el fraude, les pone una multa.
De muy diversas formas. El 80% del papel prensa y revistas que se consume viene del reciclado. En el caso de los envases, hay múltiples usos, algunos muy llamativos, como fibra textil para forros polares, moquetas, alfombras, para tuberías, para nuevos envases de plástico, para mobiliario urbano, etc.
Hay múltiples usos para los envases reciclados, algunos muy llamativos, como fibra textil para forros polaresEn algunos casos sí y en otros no. En el caso del papel y cartón, tiene que haber un 20%-25% de fibra virgen porque la fibra según se recicla se va acortando y llega un momento que no sirve. En el caso de los envases metálicos, se pueden reciclar infinitamente con la misma calidad.
Un 40% de los residuos no se recicla y acaba en vertederos básicamente. Y tiene un impacto doble, ya que además de acabar en un vertedero, con la contaminación que suponen aunque sean controlados, podrían haber sido reciclados y haber ahorrado materia prima.
Una botella de agua mineral de litro y medio pesa hoy un 30% menos que hace siete añosLa bolsa de plástico es un envase que se recicla perfectamente en el contenedor de amarillo. El problema de las bolsas es su impacto visual. La responsabilidad básica es la urbanidad de los ciudadanos: o se reutiliza o se echa al contenedor amarillo. En definitiva, se puede hacer un uso más racional y responsable de las bolsas. Las medidas que se tomen por el medio ambiente deberían ser asumibles y progresivas para que los ciudadanos nos podamos acostumbrar a ellas.
Sí. La normativa busca una homogeneidad en el cumplimiento de sus objetivos por parte de todos los países. España ha cumplido ya los objetivos de recuperación, y en las medidas de prevención estamos bastante avanzados. Las empresas españolas en estos diez años y a través de Ecoembes han puesto en marcha más de 19.000 medidas de prevención. Por ejemplo, una botella de agua mineral de litro y medio pesa hoy un 30% menos que hace siete años.
Los bioplásticos pueden ser una alternativa, pero a medio o largo plazo, porque hoy en día tienen todavía muchas incógnitas que solucionarNo me parece realista para la sociedad actual, máxime cuando los envases se pueden reciclar.
Llevan también un componente de petróleo, entre un 15% y un 20%. Además, son biodegradables y compostables bajo ciertas circunstancias, no de forma espontánea. Pueden ser una alternativa, pero a medio o largo plazo, porque hoy en día tienen todavía muchas incógnitas que solucionar, como por ejemplo cuál es su ciclo de vida.
En el caso de Ecoembes le afecta, porque los ingresos provienen de las empresas en función del número de envases que ponen en el mercado. Hoy por hoy no podemos hacer una evaluación, pero los indicadores marcan que las empresas venden menos. También es cierto que en los productos envasados de alimentación y droguería no van a haber un descenso tan pronunciado, ya que la gente seguirá consumiendo dichos productos, sólo que habrá un cambio de unas marcas más caras por otras más baratas.