El consejero de Sanidad de la Comunidad Valenciana, Serafín Castellano, señaló ayer que se están estudiando los motivos que provocaron reacciones adversas graves en tres pacientes que recibían tratamiento de hemodiálisis en el hospital Doctor Pesset (Valencia) con dializadores Arylane M-9 y que la inmovilización cautelar de estos dializadores es «una medida preventiva» para «evitar complicaciones y que no se produzcan más casos».
La Dirección General de Farmacia y Productos Sanitarios del Ministerio de Sanidad y Consumo decretó el pasado miércoles la inmovilización cautelar de los dializadores Arylane M-9, fabricados por la empresa francesa Hospal Industrie y distribuidos en España por Hospal SA, tras detectarse reacciones adversas graves en tres pacientes del hospital Doctor Pesset, situado en Valencia.
Al respecto, Castellanó, que presentó ayer a responsables del PP las leyes de Ordenación Sanitaria y de Derechos e Información al Paciente, recalcó que esta inmovilización se decretó como «medida de precaución y prevención extrema».
De esta manera, destacó que los tres afectados se encuentran «en perfecto estado porque se detectó su reacción de forma ágil», al tiempo que insistió en que con esta medida cautelar «se pretende evitar complicaciones y que no se produzcan más casos».