China ha anunciado hoy en la Cumbre de la Tierra que ha ratificado el Protocolo de Kioto, que establece la reducción de emisiones de gases contaminantes causantes del calentamiento del planeta.
China, como país en vías de desarrollo, no está obligado a reducir las emisiones de dióxido de carbono (CO2). Los objetivos recogidos en el Protocolo de Kioto sólo son aplicables, por el momento, a los países desarrollados pero, en un futuro, podría extenderse a China, la nación más poblada del mundo.
«Quisiera anunciar que el Gobierno de China ha ratificado el protocolo de Kioto», dijo el dirigente chino Zhu Rongji a los delegados de la Cumbre Mundial sobre el Desarrollo Sostenible en Johanesburgo.
«Con la llegada de la apertura y las reformas, China ha obtenido un crecimiento medio anual del 9,3% del Producto Interior Bruto en la última década», dijo. El dirigente chino también comentó que el «excesivamente rápido» crecimiento de la población estaba bajo control.
Rusia, por su parte, ha dicho también hoy que espera ratificar el pacto de Kioto sobre el calentamiento global pronto, una aceptación que aseguraría finalmente la aplicación del pacto después de la ratificación de China y a pesar del rechazo de Estados Unidos. El primer ministro ruso, Mikhail Kasyanov, afirmó que Moscú podría ratificar el Protocolo este año.