Los especialistas continúan avanzando paso a paso en lo que el médico español Rafael Rosell llama la quimioterapia personalizada contra el cáncer de pulmón. Este tumor, el más mortífero de todos, registrará en 2003 más de un millón de nuevos casos -los actuales suman ya 3,1 millones, el 90% relacionados con el tabaquismo- y se cobrará 900.000 vidas.
Este grave problema de salud pública está siendo examinado en Berlín por un millar de especialistas de todo el mundo reunidos en un simposio sobre «Nuevas estrategias en el tratamiento del cáncer de pulmón no microcítico».
Este tipo de tumor pulmonar, conocido en ámbitos científicos por sus siglas en inglés NSCLC, representa entre el 75 y el 80% de los casos y no es tan agresivo como el microcítico -de células pequeñas-, que casi siempre se presenta diseminado, incluso aunque no sea visible, y es poco susceptible de abordaje quirúrgico.
Diagnóstico difícil
Pero tampoco el tratamiento del NSCLC es fácil, porque es un tumor que no suele mostrar síntomas y su diagnóstico se produce en dos de cada tres casos en fases avanzadas en las que la cirugía está prácticamente descartada. Aun considerando la cirugía una «pieza fundamental en la evolución y pronóstico» del tumor pulmonar, el doctor Guillermo López Vivanco, del Departamento de Sanidad del País Vasco, subraya que «cada vez se afina más en el tratamiento, en función del perfil individual del paciente, y que el gran reto es cronificar la enfermedad», en el sentido de lograr «la mejor calidad de vida durante el mayor tiempo posible».
El problema, según Rafael Rosell, es que no siempre los fármacos se utilizan de forma adecuada, entre otras cosas por la falta de datos suficientes para «distinguir los grupos que responden de forma distinta» a la quimioterapia. Para el experto del Hospital Germans Trias i Pujol de Barcelona, la clave hay que buscarla en el ámbito genético, en los llamados polimorfismos de los genes reparadores del ADN o material genético de cada persona. Conocer tales polimorfismos particulares sería decisivo para determinar la resistencia a un determinado régimen quimioterápico y, por tanto, para poder «personalizar» el más adecuado.
Por lo demás, los expertos presentes en el simposio berlinés organizado por la farmacéutica Aventis coincidieron en alertar contra el tabaquismo. Si Rosell llamó la atención sobre el inquietante caso de China, donde las previsiones señalan un millón de casos, el francés Thierry Le Chevalier subrayó el dramático paralelismo entre variaciones en la incidencia de cáncer pulmonar y cambios en el hábito de fumar.
