El Documento Nacional de Identidad (DNI) es un documento de uso obligatorio, hasta el punto de que si alguna autoridad legal lo requiere y no se presenta se puede ser objeto de alguna sanción. Por eso es importante contar siempre con un DNI en vigor y, en el caso de pérdida, extravío, robo o caducidad, será imprescindible renovarlo con la mayor prontitud posible.
Según el motivo de la renovación del DNI, los trámites que se habrán de seguir y las tasas que se deberán pagar serán ligeramente diferentes.
Si roban el DNI lo primero que se debe hacer es acudir a una comisaría de policía para interponer una denuncia. De esta manera se dejará constancia legal del motivo por el cual no se dispone de él.
En cambio, si se pierde o se caduca este paso es innecesario.
El siguiente trámite es el de cumplimentar un formulario de solicitud que se puede adquirir en cualquier comisaría de policía y en algunos estancos autorizados.
Es preciso entregar el formulario cumplimentado junto a la documentación requerida (el DNI que se quiere renovar o la denuncia que documente el robo, dos fotos y un certificado de empadronamiento en caso de cambio de domicilio) ante un equipo de expedición del DNI en la comisaría más cercana. También se puede optar por enviar el impreso por correo con la documentación y una fotocopia del carné caducado a la oficina o comisaria correspondiente.
A continuación cobrarán las tasas correspondientes y entregarán un resguardo que tiene validez acreditativa de la identidad hasta que entreguen el nuevo DNI. El plazo que transcurre desde que se entrega la documentación precisa y hasta que se otorga el nuevo DNI suele ser de dos o tres semanas.
