Según afirmó ayer el comisario europeo de Salud y Protección del Consumidor, Markos Kyprianou, el 61% de los ciudadanos europeos reconoce el símbolo «CE», aunque la mayoría ignora su significado, es decir, que el producto sobre el que figura cumple la legislación europea aplicable.
El llamado «marcado CE» certifica que los productos que se venden en la UE, como las máquinas, juguetes, ascensores, aparatos a presión, equipos de comunicación, electrodomésticos o alimentos, cumplen la normativa europea y por tanto son seguros y fiables.
En una conferencia sobre las Perspectivas de la Política de Consumo en la UE que se celebró en Luxemburgo, Kyprianou abogó por desarrollar normas armonizadas en toda la UE para regular los aspectos comerciales del etiquetado de productos y proteger a los consumidores de las referencias engañosas.
El comisario explicó que la Comisión ha puesto en marcha una iniciativa para averiguar de qué forma los consumidores perciben y entienden los símbolos de etiquetado en los productos. Además, Kyprianou subrayó que el etiquetado que se aplica a productos de «algunos sectores específicos», como la nutrición y la salud, «necesita un enfoque regulador más detallado» que el que se aplica en la actualidad.
«Tenemos que asegurarnos de que esas indicaciones incluidas en las etiquetas respetan los criterios estándares, y en particular que las relacionadas con la salud pueden ser demostradas científicamente», añadió.