Microsoft anunció ayer un acuerdo con fabricantes de computadoras y semiconductores para promover una nueva forma de pago de los ordenadores en los países en desarrollo. Se trataría de una fórmula basada en el tiempo de utilización efectiva del ordenador.
Basada en una tecnología que Microsoft llamó FlexGo, esta nueva forma de pago está concebida para los compradores de ordenadores personales de los países y regiones más pobres. La idea se fundamenta en relacionar el precio pagado por el ordenador con el uso efectivo que hace el comprador. Ello es posible gracias a un sistema de tarjetas prepago que dan derecho a un cierto tiempo de utilización del ordenador.
Tras suministrar a la computadora un código que figura en la tarjeta, el tiempo ofrecido va disminuyendo a medida que pasan los minutos de uso. Después de probarse de manera exitosa durante un año en Brasil, el gigante informático estadounidense va a experimentar este sistema en China e India y, en los próximos tres meses, contará para este proyecto con el apoyo del fabricante chino de ordenadores Lenovo.