La multinacional farmacéutica Pfizer ha cancelado las pruebas clínicas de un nuevo fármaco anticolesterol llamado «Torcetrapib» para proteger «la seguridad de los pacientes», según indicó la compañía en un comunicado remitido a la Administración de Fármacos y Alimentos de EE.UU. (FDA).
En principio, «Torcetrapib», que debía reemplazar al fármaco «Lipitor», ayudaba a aumentar el colesterol HDL o «bueno», mientras reducía de forma simultánea el LDL o «malo». Pero una junta independiente que vigiló uno de los estudios sobre el medicamento aconsejó cancelar las pruebas debido a «un desequilibrio» en el número de muertes y a problemas cardiovasculares entre los pacientes.
Un total de 82 pacientes que habían tomado una combinación de «Torcetrapib» y «Lipitor» fallecieron, en comparación con los 51 que murieron, en un estudio paralelo, después de tomar sólo el segundo producto. En total, 7.500 pacientes participaron en los dos estudios.
La FDA ha apoyado la decisión de Pfizer de suspender estas pruebas. «El sistema de vigilancia de las investigaciones biomédicas funcionó de forma eficaz en este caso, al asegurar que, una vez que se detectara cierta señal, las pruebas serían suspendidas», indicó el organismo.