La malaria y el sida, dos de las infecciones más letales tienen más cosas en común que las vidas que dejan a su paso. Un equipo de investigadores de las universidades de Washington y Seattle (EE.UU.) han descubierto que el parásito de la malaria y el VIH, el virus del sida, se ayudan uno a otro para infectar a la población. El estudio, que se publica en la revista «Science», demuestra una relación de interés entre los dos patógenos que explicaría la rapidez con la que se extienden ambas enfermedades en zonas como el África subsahariana.
Estudios previos habían demostrado que la carga viral de las personas seropositivas se incrementaba cuando se producía un ataque de malaria o que las personas con VIH tenían una susceptibilidad mayor a contraer malaria.
El equipo de Laith Abu-Raddad utilizó un modelo matemático para demostrar cómo esa íntima relación afecta a la expansión de ambas infecciones en la población de mayor riesgo. Con ese modelo matemático revisaron la información recogida en una localidad de Kenia y encontraron que a esta sinergia entre patógenos se podían atribuir 8.500 infecciones de VIH y 980.00 de episodios de malaria más.
En «Science» se detalla que su hallazgo debería incentivar la protección frente a la malaria de seropositivos. Los científicos señalan también que enfermedades que no son transmitidas por vía sexual, como la malaria, pueden afectar a la historia natural del sida.