Las estimaciones recogidas en el último boletín económico del Banco de España reflejan que el crecimiento de la economía española durante el cuarto trimestre de 2006 fue del 4%, lo que supone dos décimas más que en el trimestre anterior. Así, el año 2006 terminó con un incremento del 3,8% en el Producto Interior Bruto, tres décimas por encima que en 2005.
La aceleración de la demanda interna, sostenida sobre todo en la inversión en bienes de equipo y en construcción, así como la mejora de la aportación del sector exterior son los dos factores a los que la entidad atribuye el alto crecimiento del cuarto trimestre.
El Banco de España considera que la segunda parte del año fue «más dinámica» que la primera, si bien el crecimiento fue más equilibrado de enero a junio. En el segundo semestre de 2006 se «ralentizó» la recuperación del sector exterior y la mejora de su aportación negativa al crecimiento, según el citado boletín. No obstante, el Banco de España considera que en 2006 en conjunto se recuperaron las exportaciones, pese a que también aumentaron las importaciones, y la aportación negativa al crecimiento se situó en 0,9 puntos al finalizar del cuarto trimestre.
Por otra parte, la creación de empleo siguió siendo elevada en 2006, por encima del 3%. Ello se produjo en un contexto demográfico en el que un año más hubo aumentos «apreciables» de la población activa y la tasa de paro cayó al 8,3%. Además, y a excepción de la agricultura, la actividad siguió creciendo en todos los sectores productivos.