Los requisitos para que las páginas web obtengan el sello de calidad de la Agencia de Calidad de Internet (Iqua) en cuanto al código de conducta de protección del menor han sido incrementados, según anunció el pasado sábado el citado organismo.
De esta forma, el código diferencia entre contenidos «ilegales» y «nocivos» para la infancia e incluye unos principios generales a cumplir, como son los de legalidad, honradez, responsabilidad, confidencialidad, protección de la dignidad humana, de los menores, del orden público, de la vida privada, del consumidor en el comercio electrónico y del derecho de la propiedad intelectual e industrial. Además de los contenidos ilegales, los contenidos calificados como nocivos son aquellos que, según el Iqua, «pudiendo ser accesibles por los adultos, son susceptibles de afectar al desarrollo físico o mental de los menores».
Estos contenidos son los de carácter pornográfico o sexual fuera de un contexto artístico, médico o científico; que incluyen violencia gratuita o puedan inducir a conductas agresivas; que fomenten un trato discriminatorio; o que inciten a trastornos alimentarios como la anorexia o la bulimia o a estereotipos de belleza y éxito fácil. Asimismo, se consideran nocivas aquellas páginas que inciten al consumo de tabaco, alcohol, juegos de azar o medicamentos; apelan al miedo o la superstición o incluyen contenidos de terror que pueden provocar alteraciones físico-psíquicas; usan o incitan al uso de lenguaje soez o grosero; incluyan publicidad que explote su credulidad; o contenidos que pongan en peligro al menor como petición de citas o información personal.
Este nuevo código de conducta se ha redactado para adaptarse a los nuevos usos de Internet, la llamada web 2.0, en el que los usuarios dejan de ser simples visitantes para convertirse en productores, según explicó el presidente de la Iqua, Santiago Ramentol. Esto «aumenta los riesgos» para los menores, debido a su «ingenuidad», y permite «nuevas formas», y más graves, de agresiones físicas o psíquicas a los menores, añadió.