El pasado 1 de julio se produjo en España la liberalización del mercado eléctrico. Este cambio lleva aparejado la creación del denominado «bono social», una medida que congela las subidas de la tarifa eléctrica para colectivos con rentas bajas. De los cinco millones de potenciales usuarios que tienen la posibilidad de acogerse a este nuevo sistema de tarificación, sólo 3 millones lo han hecho, y la mayoría accedieron a él de forma automática por tener contratada una potencia inferior a 3 kw.
La mayoría de las comercializadoras eléctricas aseguran que las gestiones de los consumidores apenas se han incrementado y afirman que han sido «muy pocos» los usuarios que han solicitado la adhesión al bono social. Todas coinciden en el dato de que ha sido el colectivo de los pensionistas el que ha generado la mayor parte de las peticiones para el cambio de tarificación, debido a la campaña informativa que se ha llevado a cabo a este colectivo por parte de la Administración. Se cree que con el final de la época estival se producirá un incremento de peticiones.
Desde Iberdrola reconocen que las consultas de clientes se han multiplicado, pero declaran que el proceso ha transcurrido con normalidad y que han aumentado el número de usuarios gracias a sus nuevas ofertas. Destacan la gama de descuentos enfocadas a consumidores con un gasto superior a 10 kw en el mercado libre, aunque reconocen que no han creado todavía una tarifa destinada al grueso de hogares, es decir, a los que tienen una potencia contratada de entre 3 y 10 kw, y que no pueden acogerse al bono social.
Endesa ha señalado que hará sus valoraciones en septiembre, ya que considera que es pronto para sacar conclusiones debido a las vacaciones de verano. Unión Fenosa, por su parte, recibió 12.973 peticiones para acogerse al bono social hasta el 27 de julio. De estas solicitudes, 12.503 fueron realizadas por pensionistas, 351 por familias numerosas y 119 por desempleados. En el caso de Hidrocantábrico, más de 32.000 clientes pasaron de forma automática al bono social, mientras que 2.600 lo pidieron en el último mes.
El Ministerio de Industria ha confirmado que el 75% del consumo de energía eléctrica está ya en el mercado libre, frente al 25% que continúa con tarifa. Es por eso que las empresas comercializadoras han centrado sus ofertas en el sector de clientes con potencias superiores a los 10 kw. La Comisión Nacional de la Energía (CNE) solicitó que se realizara un «contrato tipo» para este segmento del mercado, que facilitara a los consumidores la elección de compañía eléctrica y evitar así el desconcierto. Además, la CNE ofrece en su página web la posibilidad de calcular la opción más ventajosa adaptada al consumo de cada ciudadano en función de las condiciones de su contrato y de las propuestas de cada una de las comercializadoras.