Se calcula que en España hay unas 600.000 personas portadoras del virus de la hepatitis C. Sin embargo, sólo se ha diagnosticado a la cuarta parte, unas 150.000 personas, que reciben tratamiento. La coordinadora de la Asociación Española de Enfermos de Hepatitis C (AsoEEHC), Amparo González, dio a conocer este dato y reclamó esfuerzos para detectar el virus «lo antes posible».
El mayor porcentaje de contagios se produjo en la década de los noventa, mientras que los nuevos contagios son en la actualidad «más bien contados». No obstante, el infradiagnóstico predomina ante la falta de control del virus en Atención Primaria, destacó González. Para evitarlo, desde AsoEEHC tratan de impulsar una iniciativa para que se incluya el test de detección del virus en aquellas analíticas en que se pidan marcadores hepáticos.
AsoEEHC, que engloba a unos 5.000 pacientes con hepatitis C, recordó que estudios presentados en la Unión Europea (UE) desvelan cómo el 79% de los ciudadanos desconoce la enfermedad y el 69% no era consciente de haber estado en alguna situación con riesgo de contagio. «Se asocia a la drogadicción y prácticas sexuales de riesgo», si bien hay que precisar que el virus «sólo se contagia a través de la sangre, y no por la saliva, el sudor, el semen o el flujo vaginal», aseguró la coordinadora.
Un diagnóstico a tiempo incide en la calidad de vida y evita complicaciones más graves, ya que uno de cada cinco casos acaba con el desarrollo de una cirrosis, advirtió González. El diagnóstico precoz favorece además la mayor eficacia del tratamiento y aminora las complicaciones derivadas del mismo, agregó. La coordinadora de AsoEEHC reclamó un mayor compromiso de las autoridades sanitarias que mejore la concienciación de la ciudadanía y favorezca dicho diagnóstico precoz.