El viernes de la semana pasada se encontró un nuevo lince ibérico muerto, el tercero en una semana, en un camino agrícola asfaltado en los alrededores de Villamanrique, en el Espacio Natural de Doñana. Se sospecha que la causa del suceso fue un atropello, incidente responsable de la mayor parte de las muertes de esta especie en vías de extinción en Doñana.
WWF denuncia que el «desarrollo incontrolado y sin planificación alguna de una red de caminos agrícolas, muchos de ellos innecesarios y que además se han asfaltado, estrangula a Doñana y se convierte en una trampa mortal sobre las especies que en ella habitan, lo que sume a este espacio natural en el caos».
Juan Carlos del Olmo, Secretario General de WWF afirma que «esta situación es inaceptable. Pese a ser la mayor causa de mortalidad conocida para el lince en Doñana, desde hace años la Junta de Andalucía ignora el problema de las carreteras y el asfaltado de caminos agrícolas, algunos de ellos claramente ilegales, como el que une Villamanrique de la Condesa con El Rocío, asfaltado por la Consejería de Agricultura y que está a la espera de la sentencia del Tribunal Europeo». Por ello, Del Olmo exige a la Junta de Andalucía que se convoque de urgencia la mesa de la movilidad sostenible, para poner en marcha un plan que reduzca la presión del asfalto sobre Doñana y su entorno.
WWF explica que la mesa de la movilidad sostenible se convocó por primera vez en otoño de 2006, después de la muerte de cinco ejemplares de lince atropellados, y en la misma participaron tres consejerías (Medio Ambiente, Agricultura y Obras Públicas), el Ministerio de Fomento, científicos (EBD) y grupos ecologistas. De las diferentes reuniones salieron distintas propuestas (mejoras en carreteras y ecoductos) que se aplican en la actualidad, si bien no se pudo llegar a un acuerdo definitivo por la negativa de la Consejería de Agricultura a levantar el camino agrícola asfaltado de Villamanrique a El Rocío.
