El salario medio que deben destinar las familias españolas para comprar un piso se ha reducido en casi un año desde el inicio de la crisis, hasta caer cerca de los siete años al cierre de 2009, según los últimos datos del Banco de España. Esta circunstancia se debe a la caída de los tipos de interés, en el 1% desde marzo, el Euribor en mínimos históricos alrededor del 1,22% y la bajada de precios ante el pinchazo de la burbuja inmobiliaria.
Una vivienda media (93,75 metros cuadrados) costaba antes el salario medio de casi ocho años, que disminuyó a los 7,5 años en 2008. En términos anuales, los hogares destinaron el 29% de su renta bruta disponible a financiar la compra de vivienda durante el cuarto trimestre de 2009, más de 12 puntos porcentuales por debajo de lo que destinaban en el mismo periodo del año anterior (41,6%). La cifra alcanzada se sitúa así en niveles inferiores a los de 2005, cuando la renta bruta de las familias que se dedicaba a este fin se situaba en el 36,4%.
La cantidad que las familias destinaron a la compra de vivienda siguió en aumento a lo largo de 2008, al tiempo que lo hacía el Euribor, el tipo de referencia de la mayoría de las hipotecas en España, que llegó a alcanzar su máximo en el mes de julio (5,393%). Sin embargo, el porcentaje de la renta para la compra de vivienda cayó en el último trimestre de 2008, tras haberse situado en el máximo del 52,8% entre julio y septiembre, en consonancia con los últimos descensos de los tipos de interés y la progresiva reducción del Euribor, que cerró el año 2008 en el 3,452%. Además, el precio medio de la vivienda libre se situó en 1.892,3 euros por metro cuadrado al cierre de 2009, con un descenso interanual del 6,3%, según los datos difundidos la semana pasada por el Ministerio de Vivienda.
El importe medio de las hipotecas sobre viviendas bajó un 15,8% en octubre de 2009 en relación a igual mes de 2008, hasta situarse en 113.882 euros, según datos del Instituto Nacional de Estadística (INE). Tras descontar las deducciones de las que se benefician las familias por compra de vivienda a través del IRPF (un 15% con carácter general hasta un máximo de 9.015 euros anuales), los hogares destinaron el 35,9% de su renta bruta disponible a financiar la adquisición de su vivienda en 2009, cifra inferior a la del cuarto trimestre de 2008 (51,7%).