El cólera se ha convertido en una enfermedad endémica en Haití y, pese a que la expansión de la epidemia ha comenzado a disminuir, la Organización Mundial de la Salud (OMS) prevé que la enfermedad permanecerá durante varios años en el país. Los datos más recientes de las autoridades de salud haitianas apuntan a unos 231.000 casos y más de 4.500 muertos, ha informado la agencia de Naciones Unidas.
La portavoz de la OMS, Fadella Chaid, destacó que los avances en el control de la enfermedad responden a los programas de prevención e información entre la población, aunque señaló que falta financiamiento para ampliarlos. «El cólera estará presente en Haití durante años, por eso está cada vez más integrada a los programas de salud en el país», añadió.
Chaid explicó que la organización investiga las regiones donde, al contrario de la tendencia general se ha registrado un aumento de contagiados. Por su parte, la Oficina de la ONU para la Coordinación de Asuntos Humanitarios (OCHA) señaló que los esfuerzos del gobierno haitiano y los organismos internacionales se centran en este momento en ampliar los servicios de salud, sobre todo en las zonas más remotas del país. También recordó la importancia de que la comunidad de donantes responda a la petición de fondos por 175 millones de dólares para el combate de la enfermedad. Hasta ahora sólo se ha cubierto el 45% de la solicitud.
Alojamientos progresivos
Para atender a los afectados por la epidemia, Cruz Roja Española lleva a cabo un amplio programa de albergues a medio y largo plazo que consiste en la instalación de los denominados «alojamientos progresivos». Constan de una estructura metálica cubierta de 18 metros cuadrados, que puede evolucionar de forma progresiva tanto en superficie como en materiales de recubrimiento. Inicialmente se cubre con lona plástica y después con cemento y malla metálica. El número de módulos que se entrega depende del número de miembros de las unidades familiares.
La organización explicó que esta carácter progresivo permite que estos módulos puedan también ser utilizados como espacios comunitarios, aulas educativas e incluso centros de salud. La meta marcada por Cruz Roja Española en este ámbito es asistir a cerca de 4.500 familias. A fecha de hoy, ha instalado ya 1.475 alojamientos progresivos (más de 1.800 módulos).
Otros de los retos de la organización en Haití pasan por la puesta en marcha de proyectos de desarrollo económico, de salud comunitaria y de reducción del riesgo de desastres. El Plan de Acción de Cruz Roja Española en el país caribeño se prolongará durante al menos cinco años si bien, como indica su presidente, Juan Manuel Suárez del Toro Rivero, «el compromiso de Cruz Roja con la población haitiana vulnerable se mantendrá mientras persistan sus necesidades».
