La inversión extranjera en inmuebles en España repuntó un 32,8% en el primer semestre del año respecto al mismo periodo del pasado año, hasta los 2.445 millones de euros, tras aumentar tan solo un 2,6% en 2010, según datos del Banco de España. Además, estas inversiones superaron los 1.000 millones de euros entre abril y junio, por segundo trimestre consecutivo, algo que no se observaba desde 2008, antes del último desplome de estas compras. En este segundo trimestre, el incremento de las compras respecto al primero fue del 16,1%.
La compra de inmuebles por parte de extranjeros en España se redujo de forma progresiva desde el año 2003, cuando alcanzó los 7.072 millones de euros, hasta los 6.650 millones en 2004, los 5.495 millones en 2005 y, finalmente, los 4.716 millones en 2006. Sin embargo, esta tendencia se corrigió en 2007, ya que en el conjunto del ejercicio se contabilizaron 5.341 millones de euros procedentes de inversores extranjeros en viviendas, un 13,3% más respecto a 2006.
A lo largo de 2008 se sumaron 5.331 millones de euros como consecuencia de las inversiones directas en vivienda de los extranjeros en España, un 1% más que en el mismo periodo de 2007. En 2009, la crisis inmobiliaria desincentivó estas inversiones, que cayeron un 31,5%, hasta los 3.651 millones de euros.
Las inversiones en el exterior de las administraciones públicas y otros sectores residentes, excluido el Banco de España, crecieron progresivamente a partir de 2003, al pasar de 388 millones de euros en aquel año a 781 millones en 2004, 1.510 millones en 2005, 2.269 millones en 2006 y 3.365 millones en 2007. Sin embargo, la tendencia se truncó en 2008, en plena crisis económica, y estas inversiones cayeron hasta los 1.789 millones de euros, un 46,8% menos que un año antes, tendencia que se mantuvo en 2009, con un descenso del 44,9%, y que aún no ha cesado.