El Consejo de la Comisión del Mercado de las Telecomunicaciones (CMT) ha aprobado una medida cautelar para rebajar un 14% el precio mayorista que Telefónica cobra a los operadores alternativos por utilizar su red cuando estos ofrecen servicios de banda ancha a sus clientes. Esta bajada afecta a las modalidades mayoristas de acceso indirecto, conocidos como GigADSL y ADSL-IP, a través de las cuáles los rivales de Telefónica pueden ofrecer servicios de ADSL en todo el territorio.
La CMT ha explicado que ha detectado que los costes que afronta Telefónica por ofrecer estos servicios a sus competidores han descendido y, en consecuencia, «los precios vigentes están desactualizados respecto a las referencias actuales». Las mejoras en la gestión de la red y el aumento de las conexiones que funcionan a través de la red de Telefónica han hecho que estos costes para la operadora hayan descendido.
Además, cuando se revisaron por última vez los precios mayoristas del acceso indirecto en septiembre de 2009, las velocidades de referencia del ADSL en el mercado eran de 3 y 6 megas por segundo, a la que en estos momentos se ha sumado la de 10 megas por segundo. Por ello, «el coste medio por conexión que deben asumir los operadores alternativos es superior, ya que un mayor porcentaje de conexiones mayoristas se encuentran en esa franja de velocidad, cuyos precios eran más elevados», justificó la CMT.
Desde el año 2006, los precios mayoristas de banda ancha en las modalidades más demandadas de acceso indirecto (3 megas por segundo y 7 megas por segundo) han caído entre el 40% y el 70%.
Por otra parte, en la última revisión de los mercados de banda ancha, la CMT aprobó crear un servicio de acceso indirecto (NEBA) «más completo y que permitirá a los operadores tener más independencia de Telefónica a la hora de configurar las ofertas a sus clientes», señaló el organismo regulador. NEBA sustituirá a los servicios de GigADSL y ADSL IP, pero hasta la aprobación de los precios definitivos del nuevo servicio NEBA y su disponibilidad, el GigADSL y ADSL IP son la herramienta que tienen los rivales de Telefónica para ofrecer servicios de banda ancha en las zonas con menos densidad de población.