Su resistencia, ligereza y fácil colocación hacen que los tubos de PVC sean los más utilizados en las cañerías de evacuación. No obstante, al igual que ocurre con tuberías de otros materiales, también pueden tener fugas de agua o roturas. Cuando esto ocurre, se debe actuar de inmediato para evitar males mayores. Si para solucionar el problema es necesario unir o empalmar dos piezas, es preferible encolarlas, ya que este tipo de tubos tiene un coeficiente de dilatación elevado, por lo que no se deben manipular con calor.
Tuberías que gotean
Cuando se detecta una pérdida o rotura de una tubería, se debe cerrar la llave de paso general. Después, se seca la zona y, con una espátula, se aplica una masilla reparadora de acero líquido, que se extiende de modo uniforme. A continuación, se coloca cinta adhesiva de tela alrededor de la zona reparada.
Si se desea bloquear de forma provisional una pérdida, solo hay que envolver el tubo con un trozo ancho de goma y sujetar ésta con dos abrazaderas. Otra opción es utilizar un manguito con una abrazadera atornillada y revestida de goma, que se coloca sobre el tubo con la parte engomada sobre la filtración. Para fijarlo, se aprieta el tornillo con una llave.
En caso de que la fuga de agua esté en una zona de difícil acceso, se debe cortar la tubería por encima de la parte dañada y sellar el corte. Para ello, se coloca en el extremo del tubo un tapón fijado con hilo de bramante. Si se carece de los conocimientos adecuados, conviene solicitar los servicios de un profesional para culminar el trabajo.
Uniones con adhesivo
Dado que el coeficiente de dilatación de los tubos de PVC es elevado, no se deben manipular con calor. La técnica más adecuada para realizar empalmes, si se ha tenido que cortar un tramo a causa de una fuga de agua, es el encolado.
Tras cortar el tubo, hay que limar los bordes del mismo y limpiarlos con un trapo húmedo
Tras cortar el tubo, hay que limar y pulir los bordes del mismo, que se limpiarán con un trapo húmedo. Luego se encaja el tubo en el empalme y se marca la profundidad con un rotulador, para saber dónde hay que aplicar el pegamento. Tras extender un adhesivo resistente al agua, se distribuye con un pincel y se encajan las dos piezas. El tiempo de secado lo marca el fabricante del pegamento.
También se pueden realizar empalmes de tramos de PVC a través de juntas. En este caso, solo hay que cortar los tubos e insertar las juntas, si bien esta solución no está recomendada para espacios reducidos, debido al grosor de las piezas.
Para reforzar las uniones y que sean estancas, se debe utilizar teflón. Este polímero se puede adquirir en forma de cinta, de distintos tamaños. Su gran resistencia a la humedad y a las variaciones de temperatura (es capaz de soportar temperaturas de hasta unos 300ºC, por períodos prolongados y sin sufrir daños) permiten utilizarlo en todo tipo de tuberías.
Para una óptima aplicación, se enrolla sobre el tubo en sentido contrario a como se haya enroscado este último. La cinta se debe repartir por toda la zona, desde el inicio de la junta, con firmeza.