Iluminar adecuadamente la estancia en la que se encuentra el ordenador personal y saber aprovechar la luz solar son dos puntos clave para reducir la fatiga ocular que producen estos aparatos. De esta forma podrán utilizarse con mayor comodidad.
Es recomendable emplear la luz solar el mayor tiempo posible, por lo que se debe evitar que la torre en la que se encuentra la CPU impida el paso de parte de ella. Lo mejor es colocar el ordenador cerca de una ventana de manera que la luz solar le llegue desde un costado, sin que nada la interrumpa para poder aprovecharla mejor, y evitar crear sombras sobre el teclado.
No obstante, deberemos colocar el monitor en una posición en la que los rayos solares no puedan incidir sobre él, para evitar que no podamos ver algunas zonas de la pantalla. Lo más adecuado es colocar el monitor de costado, de forma que los rayos solares incidan en su parte trasera, pero sin que la sombra proyectada llegue a alcanzar el teclado.
También es importante tener una fuente de luz en el techo, pero que ésta no se encuentre a nuestras espaldas para que nosotros mismos no nos quitemos la luz. Si solemos trabajar de noche y no vivimos solos también es recomendable disponer de un flexo orientable hacia le teclado o colocado a un lateral. De esta forma podremos ver las teclas que pulsamos, si no estamos habituados a escribir sin mirar, y no nos cegará tanto el monitor si el resto de la habitación se encuentra a oscuras.
Si utiliza el ordenador como reproductor multimedia para las películas en dvd o archivos comprimidos (divx, xvid, x264 y similares) es recomendable que disponga de una iluminación con la que evite que los fuertes contrastes de luz hagan trabajar constantemente a las pupilas.
Hay varias opciones para conseguir este objetivo. La más sencilla consiste en colocar una lámpara de pie, provista de pantalla, a unos dos metros por delante del monitor y encenderla cuando sea necesario. También se puede iluminar la pared posterior al monitor con una lámpara orientada hacia la misma o colocar unos apliques murales a su espalda o tras el monitor que iluminen parcialmente la estancia.