La Junta de Castilla y León proyecta comenzar la construcción, durante este verano, de la que denomina «Ciudad del Medio Ambiente» (CMA). La idea consiste en poner en marcha, para 2012, un conjunto de edificaciones destinadas a viviendas, empresas e instituciones de I+D, y a actividades culturales y deportivas, que se integre en el entorno natural con criterios totalmente ecológicos y de desarrollo sostenible.
La urbanización se expandirá a lo largo de una superficie similar a 474 campos de fútbol y se ubicará a unos 10 kilómetros de la ciudad de Soria, en un área calificada por la Unión Europea como Lugar de Interés Comunitario (LIC). La CMA estará rodeada por las riberas del Duero, las proximidades del Monte de Valonsadero y el interior del Soto de Garray, tres ecosistemas naturales que los responsables del proyecto se comprometen a proteger.
Los arquitectos del proyecto afirman que no hay en Europa ningún desarrollo integral completo de «ciudad ecológica» como el que se prevé en SoriaEl diseño del proyecto surgió tras un concurso de ideas convocado por la Junta castellano-leonesa en 2004. Sus ganadores, los arquitectos Francisco Mangado y Félix Arranz han afirmado que no hay en Europa ningún desarrollo integral completo de «ciudad ecológica» como la que se prevé levantar en El Soto de Garray.
La ordenación de la CMA se organiza en varios «campus» o grandes zonas temáticas. El campus «Institucional» albergará centros de investigación del medio ambiente y contará con espacio para celebrar congresos y exposiciones. El campus «Investigador y Empresarial» acogerá compañías relacionadas con las energías alternativas, el aprovechamiento de recursos, el reciclaje, o la investigación forestal y agraria. El campus «Deportivo-Lúdico» contará con una piscina y un hipódromo, entre otros servicios, y se construirán paseos para peatones y ciclistas. El campus «Fluvial y Lacustre» tratará de preservar y enseñar los valores naturales del río Duero mediante recorridos didácticos. El campus del «Hábitat» albergará dos hoteles y hasta un máximo de 800 casas, en su mayor parte unifamiliares, aunque también habrá viviendas colectivas, e incluso de protección oficial.
Para hacer honor a su nombre, la CMA generará su propia energía a partir de fuentes renovables de tipo eólico, hidroeléctrico, y solar fotovoltaico y térmico. Las casas no superarán los dos pisos de altura y estarán hechas con materiales extraídos en la misma provincia, todos ellos con un alto valor reciclable y capacidad de integración, como la piedra, o la madera, y con un aprovechamiento energético máximo. Los vehículos que se muevan por el complejo deberán utilizar baterías eléctricas o de hidrógeno, y se construirá un aparcamiento exterior, abastecido con paneles fotovoltaicos, para los automóviles que utilicen combustibles fósiles.
La inversión prevista asciende a 500 millones de euros, de los que la mitad corresponderán a la iniciativa pública y privada, y la otra mitad provendrá de compañías que doten de energías limpias a la CMA, según sus responsables. En este sentido, Biovent Holding, del grupo Iberdrola, es la primera empresa que ha anunciado ya su presencia en la CMA, con una inversión directa de más de 90 millones de euros. Según los responsables de esta empresa, su proyecto se basa en tres fuentes de energías renovables: la eólica, la termosolar y la biomasa forestal. Para ello, se instalarán cinco plantas de producción tanto en la propia ciudad como en su entorno, algunas de ellas pioneras a nivel mundial, que podrán abastecer a la CMA e incluso exportar a la red general la energía sobrante.
La CMA ha recibido las críticas de los grupos políticos de la oposición y de diversas asociaciones y movimientos ecologistas, principalmente por su ubicación. El PSOE soriano considera que El Garray debería descartarse por su interés paisajístico-forestal. Por su parte, Greenpeace añade que se trata casi de un humedal, con una vegetación de ribera muy típica, por lo que si se edifica allí se perderá su biodiversidad.
Como posibles ubicaciones al proyecto aprobado, desde el partido Alternativa Soriana Independiente se ha propuesto una zona situada en las inmediaciones de la capital, en el triángulo delimitado por la variante norte, la margen izquierda de la carretera Soria – Almajano y el río Duero. La Asociación Soriana para la Defensa y Estudio de la Naturaleza (ASDEN) defiende que el proyecto debería realizarse en Soria capital, y no a 10 kilómetros de distancia, donde sólo se puede acceder en el contaminante transporte privado.