Si desea disponer en cualquier habitación de un original cabecero de cama puede optar por construir uno con un acabado en diferentes tonalidades, aunque para que no desentone con el resto de la estancia tal vez sea necesario adaptar también la decoración del resto de los muebles.
Hay dos opciones para poder fabricar un decorativo cabecero como el que se aprecia en la fotografía. Para conseguir una combinación de tonalidades clara y oscura se puede optar por adquirir dos tipos de madera con estas características o emplear pintura para diferenciar el color de ambas partes.
Corte las tablas de madera a la misma anchura de la cama y una altura idéntica, aunque la lámina central podría medir lo mismo que las otras dos, manteniéndose la simetría. Pinte los trozos de madera exteriores de un color oscuro, el central de un color claro y únalos con unas láminas metálicas en forma de T que discurran a lo largo del cabecero, de forma que también lo decoren. Una las piezas con un pegamento especial que le permita ensamblar madera y metal. Puede prescindir de este último elemento decorativo si emplea un único trozo de madera y la pinta de diversos colores.
Antes de proceder a decorar la madera deberá lijarla y pasarle un cepillo de púas, sin apretar demasiado, para acentuar su veteado. Aplíquele una mano de tapa poros, una capa de imprimación y pinte o barnícela. En este caso sería recomendable emplear un barniz-tinte que proteja la madera y a la vez deje a la vista su veteado.