La ONG Intervida
, consciente de los problemas a los que se enfrenta para construir escuelas, casas, hospitales… en los países más necesitados, ha aplicado en Malí una novedosa y económica técnica de construcción que sustituye a la tradicional. Hasta ahora, además del adobe -uno de los materiales de construcción más antiguos y de uso más difundido, cuya utilización es muy común en algunas de las regiones más pobres del mundo, como América Latina, África y Asia-, el hormigón armado ha sido la otra pieza clave en la construcción maliense. Sin embargo, se siguen buscando nuevos avances que permitan una construcción más económica y sencilla, sin dejar de lado la seguridad y el confort. Por ello, el equipo de infraestructuras de Intervida en Malí ha decidido probar una nueva técnica de edificación basada en el empleo del llamado ‘ladrillo H’, una innovación del arquitecto maliense Gaoussou Taore, que ha sido reconocido internacionalmente por la Organización Mundial de la Propiedad Intelectual por este invento.
Este ladrillo debe el nombre a su forma, que recuerda a la letra ‘H’ y simplifica mucho la obra porque se rellena con adobe (una mezcla de arena, arcilla y barro que se encuentra sin problemas en el medio rural) y no necesita de juntas entre ladrillos. Además, proporciona un mayor aislamiento térmico y acústico, y es mucho más resistente al fuego que la obra tradicional.
«Proporciona un mayor aislamiento térmico y acústico, y es mucho más resistente al fuego que la obra tradicional»
Esta técnica, que sustituye a la clásica de bloques de hormigón con mortero, permite reducir el coste de las obras en un 25%, disminuir el plazo de la construcción entre un 25% y un 50%, al tiempo que se utiliza un material fácilmente accesible y más barato, asegurando la calidad de la estructura.
La primera obra construida por esta ONG en Malí con ‘ladrillos H’ ha sido un bloque de letrinas para el centro de salud comunitaria del barrio de Medien, en la ciudad de Ségou. Era una de las carencias importantes del centro y ha sido muy bien recibida por los usuarios.
No se puede olvidar que Intervida está presente en Malí, el cuarto país más pobre del mundo, desde 2000, donde realiza proyectos de desarrollo integral que benefician a más de 100.000 personas de Ségou y Pelengana.