«Swing», «green», «caddie», «hoyo»… Hasta hace no demasiado tiempo estos términos eran desconocidos en España; ahora son palabras que casi todo el mundo emplea ya con soltura debido al aumento de la práctica del golf en nuestro país. El incremento de aficionados a este deporte, desterrado ya del club de prácticas deportivas elitistas, ha provocado el nacimiento de un nuevo producto: los seguros para jugar al golf, la última novedad en aterrizar en este sector. Aunque no son muchas las compañías que ofrecen aún a los particulares la posibilidad de suscribir este tipo de póliza, es un producto al alza que incluye tanto prestaciones de carácter general como específicas.
El principal motivo por el que un jugador de golf puede decidirse a contratar un seguro de estas características, es que, gracias a su suscripción, puede hacer frente a cualquier contingencia que pueda surgir en el transcurso de esta práctica deportiva. Pero, además, para los aficionados que participen en torneos, resulta muy útil en caso de cancelar un viaje, ya que permite recuperar parte del dinero invertido en el fallido desplazamiento.
Algunas pólizas incluyen prestaciones específicas para los aficionados que juegan fuera de las fronteras nacionales, bien durante sus jornadas de vacaciones o de trabajo
Los jugadores pueden contratar pólizas de diversos tipos, en función de la asiduidad e intensidad con las que se practique este deporte (no es lo mismo jugar esporádicamente que hacerlo de forma regular), o de la ubicación geográfica, por ejemplo. Además, algunos contratos incluyen prestaciones específicas para aquellos aficionados que juegan también fuera de las fronteras nacionales, bien durante sus jornadas de vacaciones o de trabajo. El mercado asegurador permite también suscribir una póliza que cubra todo el año, o simplemente contratarla por días.
A la medida de cada golfista
Algunas de las aseguradoras que cuentan con pólizas para practicar el golf son Mapfre y Europea de Seguros. La primera ofrece la posibilidad de suscribir un seguro dentro de sus pólizas dedicadas a diferentes actividades deportivas y relacionadas con la naturaleza (aventura, caza y safari, o esquí). Europea de Seguros también dispone de una póliza para los amantes de este deporte, en este caso es un seguro específico y de los más completos que ofrece el sector. Otra posibilidad es contratar un seguro «online», variedad que cuenta con una amplia oferta de productos que incluyen asistencia médica y repatriación, además de la indemnización (una media anual de 1.000 euros) en caso de robo, destrucción total o parcial, o pérdida por una empresa de transporte público de viajeros.
La póliza ofrecida por Europea de Seguros es muy completa y permite, en sus dos modalidades, disfrutar con tranquilidad de la práctica del golf en cualquier campo del mundo:
Golf Eagle: Tiene una duración para períodos de doce meses, y contempla todas las coberturas comunes: Accidentes, asistencia a personas o responsabilidad civil privada, y cobertura ante cualquier contingencia que pueda surgir durante los traslados y en el campo de juego. Además, incluye prestaciones específicas como cobertura del robo de equipaje, la rotura de los palos y la obtención de premios especiales por «reducción de handicap» u obtención de «hoyo en uno».
Golf Birdie: Está confeccionada para el jugador que prefiere estar cubierto puntualmente. En este caso, la póliza contempla unas coberturas comunes menos completas que incluyen accidentes, equipajes, asistencia o responsabilidad civil privada. Las coberturas específicas son exactamente las mismas que en el seguro Golf Eagle.
En definitiva, ambos seguros se diferencian en que el primero cubre períodos de doce meses, y el segundo se contrata por días. Las tarifas para la primera de las opciones -que incluye prima por persona y año, recargo e impuestos- es de 168,95 euros, mientras que para la segunda hay que abonar una prima de 4,35 euros por persona y día.
Hay pólizas anuales, pero también pueden contratarse por días, en cuyo caso habrá que abonar una prima de 4,35 euros por persona y día
Entre las prestaciones generales de este producto asegurador se encuentra una póliza de fallecimiento e invalidez como consecuencia de accidentes acaecidos durante la práctica de este deporte dentro de un club reconocido para ello, hasta un límite de 60.000 euros. Si, como consecuencia de un accidente, la víctima se viera imposibilitada físicamente para la práctica del golf, la aseguradora tomará a su cargo, con franquicia del primer mes desde que tuviera lugar el siniestro, el pago de las cuotas mensuales hasta un límite de 120 euros. Asimismo se contempla la indemnización por las pérdidas materiales sufridas durante la estancia en el club de golf a consecuencia de robo, averías o daños por incendio o robo, así como los ocasionados por lluvia o nieve, hasta el límite de 1.200 euros; indemnización por robo del material destinado a la práctica del golf, hasta el límite de 750 euros; y 180 euros por la rotura de los palos de golf. En caso de hospitalización (siendo superior a 5 días), se indemnizaría al jugador con 100 euros por día hasta un límite de 500 euros.
Para jugadores habituales
Algunas pólizas premian determinadas jugadas, una opción muy favorable para los golfistas más experimentados y los que más practican este deporte, e incluso para jugadores profesionales. Entre las acciones que cuentan «con premio» destacan:
Hoyo en uno: Si durante un torneo oficial el asegurado consiguiese realizar esta jugada, se le abonarán hasta 150 euros para la compra de material de golf.
Reducción del «handicap»: Si durante los torneos oficiales en los que el asegurado participe durante un año, consiguiese una reducción de cinco puntos de su «handicap», la aseguradora también abonaría hasta 150 euros para la compra de material de golf.
Ganar tres torneos: Si el asegurado resultara ganador en un año de tres torneos oficiales de un mismo club, se abonarían hasta 150 euros por este concepto.
La contratación de este tipo de pólizas suele cubrir la rotura de los palos de golf, siempre que se produzcan como consecuencia de una acción súbita e involuntaria y, por tanto, accidental. Para poder tener acceso a la indemnización correspondiente, es necesario presentar el palo roto, así como la factura de reposición.
La indemnización consistirá en el coste de reparación del palo. En caso de que ésta no sea posible, se calculará sobre el valor real del palo de golf siniestrado, es decir, el que tenía en el momento inmediatamente anterior al siniestro. El valor real se determina deduciendo del “valor de nuevo” (considerándose éste como aquel precio de venta del objeto asegurado en estado de nuevo) la depreciación por vetustez, uso y desgaste. La indemnización nunca excederá del montante del perjuicio sufrido ni tomará en consideración daños indirectos.