El proveedor de acceso a Internet norteamericano Comcast se ha convertido en uno de los primeros en aplicar una limitación en la transferencia mensual de datos que sus clientes pueden descargar cada mes, pero no es el único tentado a aplicar tales restricciones. Si esta limitación se extiende a toda la Red, podría afectar al futuro desarrollo de la sociedad de la información y al acceso a contenidos multimedia y de alta definición.
Imagen: Jordi Sabaté
Con la proliferación de la tecnología ADSL, las llamadas tarifas planas de acceso se convirtieron en una realidad. Sin embargo, unos años después, y debido al consumo intensivo de ancho de banda de los nuevos servicios de la llamada Web 2.0 (en los que los usuarios acceden a contenidos multimedia y al mismo tiempo producen los suyos propios), algunos proveedores de acceso a la Red han empezado a limitar la descarga mensual de datos que puede hacer cada usuario. El motivo es que consideran que tanto consumo de ancho de banda les genera demasiados costes de mantenimiento e inversión y el consumidor paga un único precio.
Las compañías proveedoras consideran que tanto consumo de ancho de banda les genera demasiados costes de mantenimiento e inversión
Uno de los primeros proveedores de Internet en aplicar esta medida ha sido el proveedor de acceso (ISP) norteamericano Comcast, que ha estado recortando el ancho de banda de sus clientes en función del tipo de la aplicación utilizada. Principalmente losprogramas P2P han sido los más castigados por estas limitaciones. Aunque también se ha producido este recorte en casos de usuarios que, sin utilizar programas P2P, tienen un consumo de ancho de banda que Comcast considera excesivo.
Los defensores de los cibererechos consideran estas prácticas como una violación de la garantía conocida como neutralidad de la Red, es decir, no cobrar un precio diferente por cada servicio que se utilice, y no discriminar el tráfico de Internet en función de su uso. Así, se corre también el peligro de que los proveedores puedan regular el tráfico de la Red a su gusto y conveniencia, y hacer más lento el acceso a contenidos ajenos a la vez que se dota de la máxima velocidad a los contenidos propios o de sus socios comerciales.
¿Usuarios insolidarios?
Comcast se defiende de las acusaciones de manipulación del flujo de datos de sus clientes alegando que estos usuarios a los que penaliza son los responsables de la baja calidad de servicio que se produce a determinadas horas, pues monopolizan el ancho de banda en detrimento del resto de los internautas. La compañía los acusa de insolidarios.
Los proveedores podrían llegar a hacer más lento el acceso a archivos ajenos dotar de la máxima velocidad a los contenidos propios
Sin embargo, el organismo regulador de las telecomunicaciones en Estados Unidos (conocido como FCC) ha decidido castigar a la compañía obligándole a revelar los procedimientos que utiliza para discriminar el tráfico de Internet a sus clientes, así como a presentar un nuevo plan para acabar con estas prácticas y no romper la neutralidad de la Red. Fruto de esta resolución, Comcast anunció que a partir del 1 de octubre de este año sitúa el límite para el uso de ancho de banda de los usuarios residenciales de 250 gigabytes al mes.
Aunque esta cantidad de gigabytes pueda parecer alta, hay que tener en cuenta que el peso de las páginas web se ha triplicado en los últimos años. Es decir, la cantidad de tráfico que se genera para acceder a la misma información que en 2003 es tres veces superior. Además, con este ancho de banda el acceso a los vídeos, a la televisión de alta definición mediante streaming y, en general, a todos los contenidos multimedia se ve claramente perjudicado.
Otros ISP norteamericanos, como Time Warner, disponen desde el pasado mes de junio de un plan de acceso a Internet en función del ancho de banda, que cobra un extra por cada gigabyte adicional consumido.
¿Puede pasar en España?
En España los operadores de telefonía móvil que ofrecen tarifas de acceso a Internet mediante la utilización de módem USB también aplican restricciones en sus contratos de acceso a Internet. Las principales empresas del sector comercializan sus tarifas más populares para el mercado residencial con una limitación de ancho de banda situado entre un gigabyte y cinco gigabytes al mes.
El Parlamento Europeo ha aprobado una enmienda para hacer más claros y transparentes los contratos que firman los usuarios a la hora de darse de alta en un servicio de acceso a Internet
Además, no permiten que sus usuarios puedan utilizar el módem para acceder a servicios de voz sobre IP (Voip) ni a servicios que utilicen el protocolo P2P. Con estas limitaciones, los usuarios de Internet de los operadores móviles no pueden utilizar sus conexiones para visualizar contenido multimedia, hablar por Skype, ni descargar contenido de gran peso.
Otros proveedores que suelen aplicar limitaciones en el ancho de banda consumido cada mes son los ISP que ofrecen servicios de conexión a Internet a través de otras tecnologías como el acceso por satélite. Además, según están establecidas las diferentes leyes de telecomunicaciones de la Unión Europea, los proveedores de acceso fijo sí podrían limitar el tráfico de datos a sus clientes.
Es por ello que a finales de septiembre el Parlamento Europeo aprobó el denominado «Paquete de Telecomunicaciones». Se trata una serie de enmiendas para legislar sobre algunos de los aspectos más importantes del sector de las telecomunicaciones en Europa.
Entre otras medidas, el Parlamento Europeo ha aprobado una enmienda para hacer más claros y transparentes los contratos que firman los usuarios a la hora de darse de alta en un servicio de telecomunicaciones, como puede ser el acceso a Internet. Estas empresas deberán a partir de ahora indicar claramente en los contratos las restricciones que piensan aplicar a la conexión para que los usuarios tengan claro en cada momento qué tipo de servicio contratan.