Pólizas para oficinas

El asegurado es quien incluye las coberturas que desea tener en función de su actividad y de los bienes que quiere asegurar
Por Rosa M. López-Maroto 22 de marzo de 2009
Img oficina inundada
Imagen: Justin Brockie

La documentación de un bufete de abogados, las herramientas de un electricista o un fontanero, los planos de un despacho arquitectónico… Los profesionales liberales y los trabajadores autónomos tienen la necesidad de tener a cubierto su espacio laboral y todo lo que en él se guarda. Pero no todas las actividades necesitan las mismas herramientas, ni todas las oficinas tienen la misma estructura, por lo que hay pólizas de seguros específicas y personalizadas en función de las necesidades de cada profesional: si algunas incluyen una cláusula en caso de la paralización de la actividad, otras inciden en asegurar los documentos albergados en las oficinas. La oferta aseguradora incluye la elección de un seguro “a la carta”, y es el propio asegurado quien incluye las coberturas que desea tener en función de la actividad de su oficina y de los bienes que quiere asegurar.

La mayoría de las compañías de seguros disponen actualmente de pólizas para oficinas. Ante tan abrumadora oferta, lo primero que debe hacer el profesional interesado en contratar un producto de estas características es estudiarlo minuciosamente, evaluando pros y contras, y teniendo en cuenta siempre su situación particular. Por ejemplo, si el local se encuentra en un bajo, sería conveniente que valorara la necesidad de contratar coberturas ante posibles inundaciones.

Garantías específicas

Las oficinas tienen unas características propias, y ello hace que sus seguros se distingan de cualquier otro relacionado con el sector del comercio. Por ello, sean cuáles sean las características y necesidades de cada local, las pólizas suelen incluir como garantía específica la responsabilidad civil profesional de administradores de fincas, agentes de la propiedad inmobiliaria, asesores fiscales, abogados y procuradores. Mantener la oficina siempre protegida para que nada pueda hacer peligrar su actividad, su cuenta de resultados o la integridad de sus empleados y clientes debe ser el objetivo de quienes deseen contratar estos seguros.

Algunas pólizas incluyen como garantía específica la responsabilidad civil profesional

Las garantías básicas que cubren estas pólizas son frente a incendio, explosión, rayo, daños por agua, rotura de cristales, daños eléctricos, robo y pérdidas relacionadas con daños materiales. Pero, además, hay garantías opcionales que pueden sumarse a la cobertura básica, entre ellas la garantía sobre ordenadores o equipos electrónicos, por interrupción del negocio, e incluso la infidelidad de los empleados. Algunas pólizas van más lejos al incluir reclamaciones por incumplimiento de contratos de servicios y productos, mientras que otras ofrecen asistencia jurídica al asegurado, en especial en los casos relacionados con los derechos relativos al local de negocios.

El precio de los seguros depende de muchos aspectos: tipo de oficina, mobiliario, existencias, documentos que albergue… Al no existir una tarifa estándar, todo está en función de las características específicas que se contraten, aunque la cuota anual que habrá que abonar siempre es superior a la de las pólizas para particulares. Algunas incluyen bonificaciones en caso de que no ocurra ningún incidente durante el ejercicio asegurado, al igual que ocurre con los seguros para coches.

Para calcular el desembolso, hay que tener en cuenta algunos aspectos:

  • Capital del continente: se tendrá en cuenta la capacidad de la oficina o despacho, y otros parámetros como techos, paredes o suelos.
  • Capital de mobiliario: es el valor del mobiliario de la oficina (estanterías, mesas, sillas, etc.). También se incluye en este apartado todo aquel mobiliario de índole tecnológica, lo que engloba a ordenadores, cajas registradoras o herramientas ofimáticas que tendrán una tarificación distinta por parte de la aseguradora.
  • Existencias: pueden variar a lo largo del año, de ahí que si su oscilación no es muy importante, nunca se deben valorar a la baja, pues en caso de siniestro se perdería todo aquello que no se hubiera asegurado.

Coberturas «a medida»

La lista de aseguradoras que disponen de esta solución profesional es lo suficientemente extensa como para poder seleccionar las más convenientes en cada caso. Las más importantes compañías del sector: Catalana Occidente, Lagun Aro, Liberty, Mapfre, Ocaso, Pelayo y Zürich, cada una, a partir de unas coberturas básicas, incluyen diferentes soluciones en función del local y de la actividad profesional a las que están dirigidas. Pelayo Seguros, por ejemplo, dispone de un seguro para oficinas con cobertura de robos, incendio, rotura de mobiliario, fenómenos meteorológicos, paralización de la actividad, transporte de existencias o daños que sufran las existencias aseguradas, entre otras contingencias. Ocaso Seguros cuenta con una póliza en la que se delimitan las garantías específicas (con cobertura a los bienes y equipaje de los clientes o residentes en el establecimiento asegurado) y las básicas (daños materiales asegurados, gastos asegurados y asistencia jurídica y legal). También incorpora garantías opcionales para daños por agua, roturas de mobiliario y robo y atraco, siendo su principal apuesta la asistencia jurídica con respecto a las reclamaciones por incumplimiento de contratos de servicios.

El precio de los seguros depende de muchos aspectos de las características específicas que se contraten

Catalana Occidente ha creado una solución «a la carta» para cinco tipos de negocios. Así, diversifica la oferta en función del ámbito profesional, estructurándose en torno a estos ámbitos: agencias, despachos profesionales, oficinas, centros de enseñanza y sanidad. Destaca como novedad la posibilidad de indicar en una misma póliza dos actividades de negocio que puede realizar la oficina asegurada. Asimismo, se amplían las coberturas existentes (como daños por agua rotura de cristales y robo) y se incluyen otras nuevas (asistencia en caso de siniestro, o rotura de sanitarios, equipos informáticos y bienes refrigerados). Lagun Aro ha decidido ampliar las pólizas también a los despachos profesionales, como fórmula para abarcar todo el segmento de negocios. La principal cualidad de Liberty Seguros es un servicio de asesoramiento personal que permite ampliar las coberturas de la póliza a la medida de cada solicitante. Mapfre se distingue por su especial protección al patrimonio asegurado y a la mercancía en movimiento, y Zurich Seguros cuenta con un servicio de asistencia especial y una bonificación en la póliza en el caso de que no se haya producido ningún percance durante el ejercicio asegurado.

PRINCIPALES COBERTURAS
  • Incendio. Cubre tanto los daños en la oficina como los que pudieran ocasionarse a terceros (vecinos, edificio o lugares públicos).
  • Fenómenos meteorológicos. Da cobertura por los daños que pueden producir tanto riadas e inundaciones (en las oficinas ubicadas en bajos) como los ocasionados por tormentas a equipos informáticos, etc.
  • Actos vandálicos. Cubre los desperfectos producto de acciones violentas en el mobiliario, y daños en las cerraduras del local. Es idóneo para oficinas a pie de calle, las más expuestas a este tipo de acciones.
  • Roturas. Cubre la rotura de lunas, vidrios, rótulos, anuncios luminosos…
  • Defensa jurídica y reclamaciones.
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