Los medios de comunicación publican cada día noticias y datos que pueden servir para interpretar el estado real de un valor y, por tanto, para realizar compraventas en función de la evolución. Sin embargo, anticiparse a la publicación de una noticia o un dato económico es clave para rentabilizar mejor la inversión. Si se detectan con tiempo los resultados que cada empresa que cotiza en Bolsa debe presentar a la Comisión Nacional del Mercado de Valores, el inversor puede beneficiarse mucho: comprar más barato y obtener mayores posibilidades de revalorización.
Noticias: una herramienta útil
«Hay que comprar con el rumor y vender con la noticia». Esta vieja máxima de los corrillos bursátiles, que por lo general se cumple, permite a numerosos inversores rentabilizar su capital. Las empresas generan a diario noticias que propician movimientos en su cotización. Por este motivo, el inversor a corto plazo debe estar pendiente para escoger el momento adecuado para entrar o salir del mercado y ahorrar unos cuantos euros en cada operación.
Los valores que componen los índices bursátiles son muy sensibles a las noticias relacionadas con el mundo de la economía y de las empresas que cotizan en la renta variable. Reaccionan según la trascendencia y magnitud de las mismas, de modo que las informaciones económicas son una herramienta que pueden utilizar los inversores para su propio beneficio. Si consiguen anticiparse, tendrán el camino libre para obtener plusvalías o -en caso de noticias desfavorables- la oportunidad de vender o esperar a mejores oportunidades de negocio.
Si un inversor se anticipa a una noticia podrá obtener plusvalías, tener la ocasión de vender o esperar mejores oportunidades
En cualquier caso, es una ocasión inmejorable para ahorrar en cada operación. ¿Pero cómo obtener esta información? Los medios de comunicación especializados, tanto de prensa escrita como portales de Internet, atisban los resultados de las cuentas de las empresas o interpretan con veracidad los datos macroeconómicos (Producto Interior Bruto, inflación, paro, tipos de interés, etc.).
Datos macroeconómicos
Las noticias que más relación guardan con el mercado bursátil son las provenientes de la macroeconomía. Sus resultados se publican con periodicidad mensual o trimestral y pueden ser el punto de partida para que se inicie una escalada en los precios (o una caída). En algunos casos, son fáciles de detectar por parte de los inversores minoristas, ya que la evolución de la economía siempre da pistas de cómo van a salir las cifras, de ahí que pueda anticiparse a la publicación de los mismos con el objetivo de tomar posiciones en la renta variable.
No todos los datos son los mismos ni tienen la misma repercusión en la renta variable, de ahí que sea necesario conocer cuáles pueden afectar más a sus intereses. Estos son algunos de ellos:
Paro: su disminución es una buena señal para que la Bolsa se muestre alcista, porque indica la posibilidad de que aumente el consumo.
Producto Interior Bruto: indica el estado real de una determinada economía. Si está en recesión, si se sale de ella o atraviesa un período expansivo.
Inflación: de menos importancia para los analistas, pero imprescindible para saber cómo evolucionarán los tipos de interés, es muy sensible a los intereses de las empresas que cotizan en Bolsa.
Tipos de interés: es un dato crucial para dictaminar el rumbo que tomarán las Bolsas tras las reuniones de las autoridades monetarias de uno y otro lado del Atlántico. Una rebaja de medio o tres cuartos de punto se recibe con satisfacción por los mercados, mientras que en signo contrario tiene un efecto negativo sobre la cotización de los valores.
La explicación es sencilla. Una bajada en los tipos de interés dota de una mejor financiación a las empresas, algo muy bien recibido por las mismas y, por tanto, por los mercados.
Estos cuatro datos son los más importantes para despejar la evolución de la Bolsa. Otros no tan decisivos, pero también importantes, son el índice de confianza del consumidor o de los empresarios y la balanza comercial.
Noticias domésticas
No solo son determinantes los datos a gran escala. Los informes generados por la empresa -o por el sector del que procede- son igual de importantes, ya que configuran el análisis fundamental del valor, clave al decantarse por uno u otro valor. Cada tres meses, las compañías que cotizan en la renta variable mandan sus resultados empresariales a la Comisión Nacional del Mercado de Valores (CNMV) y los difunden por todos los medios de comunicación. Son una de las mejores pistas para comprobar la salud actual de la empresa, nivel de endeudamiento, crecimiento, etc. Por ello, es habitual que los valores se «calienten» los días previos a su publicación.
Además de los datos o informes empresariales, otros parámetros pueden pasar más desapercibidos, pero su repercusión en la evolución bursátil de la compañía resulta en ocasiones esencial: desde el anuncio de una ampliación de capital a posibles compras como parte de un proceso expansivo. Cualquier dato o noticia que afecte a una empresa repercute en la misma, ya que son muy sensibles a cualquier acontecimiento que genere el mercado. La mayor dificultad para los pequeños y medianos inversores es anticiparse a esas subidas antes de que se difunda un informe. Pero para ayudarles, hay portales que difunden cualquier novedad, por pequeña que sea.
Algunos de los parámetros a los cuales debe prestar especial atención el inversor minorista si quiere sacar partido a su inversión, y ahorrar costes, son los siguientes:
Demanda del producto o de los servicios: se acogen con optimismo por los mercados, que lo interpretan como una señal de fortaleza del negocio.
Interés por parte de otras compañías: detonante de fuertes alzas en su cotización, ya que es previsible que otros grupos empresariales entren en su accionariado.
Datos del propio sector: indican cómo puede ser la evolución del sector en los próximos meses, a través de los datos de consumo interno. Son datos relevantes el número de pasajeros que eligen el avión para sus desplazamientos, en el sector aéreo, o el aumento en el número de abonados en una empresa de telefonía móvil o fija.
Nivel de endeudamiento: será reflejo de la realidad de la empresa y de su capacidad para amortizarla, lo que influye en la evolución de su cotización. Cuanto mayores sean sus deudas, más difícil será que un valor establezca una tendencia alcista estable.
Los brokers e intermediarios financieros publican de manera regular informes de gran utilidad para radiografiar a la empresa analizada. Son de gran utilidad para que los inversores tomen una u otra posición en el mencionado valor. En los informes, entre otros aspectos, se especifica la pérdida o beneficio neto de la empresa durante un ejercicio fiscal, lo que proporciona su alza o descenso con respecto al mismo periodo del año anterior.
También se constata la cifra de negocio del grupo y si se ha registrado un incremento o no en esta variable. Por último, se tiene acceso al nivel de endeudamiento -si lo hubiera- y en qué magnitud. Los corredores finalizan estos informes con una recomendación sobre el valor: comprar, vender o mantener. En algunos casos, incluso los dotan de un precio objetivo que puede ser muy interesante para comprobar su potencial de revalorización.