Si el consumidor no va al Punto Limpio, el Punto Limpio va al consumidor. Cada vez más municipios tienen Puntos Limpios móviles. Su objetivo: acercarse a los ciudadanos para que reciclen los residuos peligrosos o de gran volumen que no pueden depositarse en los contenedores urbanos (pequeños electrodomésticos, ropa, aceite, teléfonos y ordenadores, baterías, etc.). Para conocer el lugar y hora de recogida, el tipo y cantidad de residuo permitido, lo mejor es consultar al departamento municipal de medio ambiente por teléfono o Internet. Y si carece de tal servicio, reclamarlo.
Para qué sirven los Puntos Limpios móviles
Imagen: chiclananaturalLos Puntos Limpios (conocidos como Ecoparques, Garbigunes o Deixalleries en algunas comunidades autónomas) recogen los residuos peligrosos o de gran volumen generados en casa, en la oficina o en pequeños comercios y que no pueden depositarse en los contenedores de la calle. Son gratuitos, pero los consumidores tienen que llevar sus residuos a estos centros de reciclaje, un tanto alejados de los centros urbanos. Además, no todos los municipios disponen de este servicio.
Los Puntos Limpios móviles cubren esta carencia. Se trata de camiones con contenedores especiales para recoger de manera selectiva y segura dichos residuos peligrosos y voluminosos. Sus responsables realizan una ruta regular por el municipio y aparcan en unas zonas y horas establecidas.
Cómo usar un Punto Limpio móvil
Los Puntos Limpios móviles realizan una ruta regular por el municipio y aparcan en unas zonas y horas establecidasEn general, los Puntos Limpios móviles admiten residuos muy diversos: aceite doméstico, baterías, aerosoles, barnices, ropa usada, pinturas y disolventes, tóner y desechables de impresoras, vídrio, bombillas fluorescentes, radiografías, envases, teléfonos móviles, medicamentos, pilas, papel y cartón, cosméticos, latas, chatarra electrónica, pequeños electrodomésticos, escombros y restos de obras, enseres domésticos (colchones, somieres, muebles metálicos), CD y DVD…
No obstante, antes de acudir a ellos hay que informarse del horario y punto de entrega, de los residuos concretos y de los litros, kilos o unidades que admite como máximo. Los responsables municipales ofrecen estos datos en su página web o en el télefono de atención ciudadana. Si el municipio carece de este servicio, los consumidores tienen derecho a reclamarlo a sus responsables institucionales como un servicio más del sistema de recogida de residuos urbanos.
Una vez en el Punto Limpio Móvil, hay que seguir unas sencillas indicaciones. Hay diversos modelos, pero en general disponen de una plataforma de acceso a los compartimentos de los diferentes contenedores. Cada uno de ellos lleva un rótulo visible que identifica el tipo de residuo que puede depositarse. La instalación no genera olores y carece de riesgos de toxicidad o peligrosidad.
Los Puntos Limpios móviles ofrecen un buen servicio. No obstante, según diversos consumidores y asociaciones vecinales, deberían aumentar el horario (en algunos municipios pasan una vez al mes), informar más y estacionar en lugares más accesibles y céntricos.
Puntos Limpios móviles: ventajas para el medio ambiente
El medio ambiente agradece de varias formas la utilización de los Puntos Limpios móviles. Desechos como aceites o pesticidas son muy nocivos para el agua, los gases CFC y HCFC de antiguos frigoríficos contribuyen a disminuir la capa de ozono, los aparatos electrónicos, pilas o pinturas contienen metales pesados tóxicos como plomo, mercurio o cromo, cualquier producto de origen petroquímico como disolventes, pinturas, pegamentos, etc., pueden generar compuestos orgánicos volátiles (COV) con efectos incluso cancerígenos, etc. Además, evitan el impacto ambiental de los vertidos incontrolados y contribuyen a la reutilización y reciclado de residuos.