Animales con más de 200.000 seguidores, mapas interactivos de la biodiversidad española, iniciativas de empleo verde, lugares virtuales de intercambio de productos o para compartir coche y garaje, foros para informarse y debatir sobre medio ambiente… El fenómeno de las redes sociales ha irrumpido con fuerza en todo lo relacionado con lo “verde”, a juzgar por las cada vez más numerosas iniciativas.
Lanzar a la fama a animales singulares: las redes sociales más conocidas, como Facebook y Twitter, han propiciado el estrellato digital de algunos animales. Sus historias curiosas han cautivado la atención de miles de seguidores en todo el mundo. La cobra que escapó del Zoo del Bronx, Knut, el oso polar del Zoo de Berlín, Penelope, el elefante marino de la reserva del Norte de California, o la llama Polka son algunos de estos «animales 2.0».
En algunos casos se quiere ir más allá de lo anecdótico y utilizar estas herramientas tecnológicas para ayudar a la conservación animal. Chris Johnson es el creador de un documental sobre las «vaquitas», un cetáceo al borde de la extinción que vive solo en el golfo de México. Según Johnson, cada empujón a su proyecto en las redes sociales (se puede ver el vídeo de la introducción) puede suponer la diferencia entre salvar esta especie o dejar que desaparezca.
Imagen: BiodiversiaComo señala Roberto Ruiz, presidente de la Asociación de Ciencias Ambientales (ACA), las redes sociales pueden salvar el medio ambiente. Ruiz recuerda a Félix Rodríguez de la Fuente como un pionero en este sentido, ya que hablaba hace 30 años de la necesidad de una mente pensante colectiva.
Conocer y conservar la biodiversidad: la Plataforma Biodiversia es una red social para fomentar la educación y sensibilización ambiental. Creada por la Fundación Biodiversidad, ofrece la información del Inventario Español del Patrimonio Natural y la Biodiversidad. Cualquier ciudadano puede utilizarla y subir fotos, vídeos, participar en foros, chats, etc. También ofrece Biomap, un visualizador cartográfico, basado en Google Maps, con datos sobre especies, hábitats, bosques, incendios, etc.
Las redes sociales pueden salvar el medio ambiente
Fomentar el empleo verde: la Red Emprendeverde se dirige a emprendedores e inversores vinculados con el medio ambiente. Esta red social, también de la Fundación Biodiversidad, ha sido cofinanciada por el Fondo Social Europeo y cuenta con el apoyo de varias empresas y asociaciones empresariales del sector. Sus responsables han lanzado un concurso, con 150.000 euros en premios, para reconocer las mejores iniciativas de economía sostenible.
Intercambiar productos usados: los integrantes de la red Freecycle canjean gratis todo tipo de artículos y reducen así la cantidad de basura. La idea es fomentar la reutilización y aumentar la vida útil de los productos y, de paso, ahorrar dinero. Por su parte, diversas instituciones han lanzado redes de intercambio de productos de segunda mano. Uno de las más recientes es GipuzkoaTruke, de la Diputación guipuzcoana.
Compartir coche y garaje: contaminar menos y ahorrar dinero. Con esta idea, las redes sociales promovidas por empresas y asociaciones de usuarios para utilizar el coche de forma compartida («Car Sharing«) son cada vez más numerosas.
Hablar sobre medio ambiente y solidaridad: faceCoop es una red social que pretende informar y poner en contacto a personas interesadas por la solidaridad, el medio ambiente, la cooperación y el desarrollo. Es una iniciativa de la ONG de Desarrollo Solidaridad Internacional, cofinanciada por la Agencia Española de Cooperación Internacional para el Desarrollo (AECID). Por su parte, Becobook se basa en Facebook para crear vínculos, compartir experiencias y conocimientos para mejorar el planeta.
Ante el éxito de las redes sociales, se proponen todo tipo de alternativas formativas y el medio ambiente no es una excepción. El Instituto Superior del Medio Ambiente, con sede en Madrid, imparte el curso presencial “Redes sociales y medio ambiente: aplicación de la web 2.0 al sector”. Por su parte, el periodista Clemente Álvarez dirige diversos cursos sobre redes sociales y su aplicación en el terreno ambiental.