La penetración de los ha crecido desde el 18% al 40% entre los usuarios domésticos en el último año. Estos dispositivos han pasado de considerarse un capricho elitista a entrar a formar parte del ecosistema de objetos de uso habitual y cotidiano, ya sea para fines lúdicos, sociales o laborales. Uno de los motivos de esta rápida popularización del smartphone reside en la oferta en constante renovación de los fabricantes, cuyos teléfonos de baja gama ya incluyen conexión a Internet y otras funcionalidades básicas hasta ahora solo al alcance de terminales más avanzados. De igual forma, los operadores de telecomunicaciones ofrecen este tipo de terminales subvencionadosa coste muy inferior mediante la aceptación de una cláusula de permanencia de entre 18 y 24 meses.
Han pasado de considerarse caprichos elitistas a entrar en el ecosistema de objetos de uso habitual y cotidiano
El fabricante español Geeksphonecuenta en la actualidad con un modelo de smartphone denominado Zero, que se vende de forma libre y sin compromisos con operadores, a un coste de 189 euros, impuestos incluidos. Este terminal utiliza el sistema operativo Android y dispone de una pantalla multitáctil de 3,2 pulgadas retroiluminada por LED, cámara de 5 megapíxeles con autofocus, navegador GPS, conectividad wifi, Bluetooth y 3G. Además, integra sensores de movimiento, proximidad y luminosidad. Es un ejemplo de que es posible proponer móviles a precio asequible.
Smartphones de la gama Nokia Asha
El pasado mes de octubre, Nokia presentó una nueva serie de móviles económicos bajo el nombre deAsha. Esta serie está compuesta por cuatro modelos de teléfonos móviles con el sistema operativo Symbian s40 y con una serie de aplicaciones instaladas por defecto, como WhatsApp, Messenger, correo electrónico mediante sistema «push», acceso a redes sociales como Facebook Chat, Nokia Maps o el videojuego Angry Birds, para que sean más fáciles de usar por usuarios que no están habituados a la compra y descarga de aplicaciones. Además, incorporan conectividad wifi y 3G.
El modelo más básico es el Nokia Asha 200, con doble ranura para tarjetas SIM. Este móvil dispone de una funcionalidad denominada «Easy Swap», que permite cambiar la SIM del teléfono sin necesidad de apagarlo. Destaca un teclado QWERTY, una pantalla de 2,4 pulgadas con resolución de 320 x 240 píxeles, navegador GPS y cámara de fotos de dos megapíxeles, por un precio estimado en tiendas de electrónica de 60 euros (impuestos no incluidos).
El modeloNokia Asha 201 comparte diseño, características y precio con el modelo 200, excepto que solo soporta una sola SIM. Ademas, este modelo está enfocado a la reproducción de música. No estará disponible en las tiendas españolas hasta el primer trimestre de 2012. Su precio será el mismo que el del Asha 200, en torno a los 60 euros.
Por su parte, el Nokia Asha 300 cuenta con una pantalla táctil de 2,6 pulgadas, un procesador de 1 gigahercio, cámara de fotos de 5 megapíxeles y conectividad wifi y 3G. Este terminal tiene un coste de 85 euros. Por último, el modelo Nokia Asha 303 comparte características comunes con el modelo 300, pero añade un teclado físico QWERTY. El coste de este terminal libre es de 115 euros.
Otros modelos de móviles asequibles
Sin realizar una apuesta tan radical como Nokia, otras marcas fabricantes también se inclinan por smartphones a precios que, al menos, no sean prohibitivos para la mayoría de consumidores. Rondan los 200 euros, funcionan con el sistema operativo Android, impulsado por Google como alternativa al iOS de Apple, y procuran implementar las funciones básicas de conectividad y comunicación con pantallas táctiles e, incluso, con teclados físicos.
El HTC Tatoo es un modelo que cuenta con una pantalla táctil LCD de 2,8 pulgadas del tipo resistivo, que muestra una menor definición que otros modelos del mismo fabricante, pero aporta un ratón táctil en lugar de rueda, lo que ofrece mejor usabilidad. Está equipado con un procesador Qualcon a 528 megahercios y una memoria Ram de 556 megabytes. La conectividad es wifi, Bluetooth y 3G. Su precio libre es de 216 euros.
LG Optimus ME P350 es un smartphone asequible con todas las características de estos dispositivos: pantalla táctil de 3 pulgadas, un procesador de 600 megahercios y conectividad wifi, Bluetooth y 3G. Además, incorpora una ranura para ampliar la memoria interna con tarjetas Micro SD y una cámara fotográfica de 3 megapíxeles. Su precio en tienda recomendado ronda los 120 euros.
Samsung Galaxy Spica i7500 es la apuesta de la casa coreana por un modelo a precio asequible con una pantalla táctil y toda la conectividad propia de un teléfono de última generación. Dispone de cámara, pantalla táctil de 3,2 pulgadas y un procesador de 800 megahercios. La conectividad es wifi y 3G, además de Bluetooth. La memoria interna es de 200 megabytes, ampliable a varios gigabytes mediante tarjetas Micro SD.
A pesar de una menor barrera de entrada a este tipo de dispositivos, no todos los mercados tienen el poder adquisitivo suficiente para acceder a un smartphone de última generación. En cambio, algunos de ellos, sobre todo en el Tercer Mundo, tienen una mayor necesidad de estos aparatos que el mundo desarrollado. El motivo es que en muchas zonas pobres no hay infraestructura terrestre de acceso a la Red y este se realiza en exclusiva por las ondas móviles.
El teléfono se convierte de este modo en un instrumento vital para la comunicación y la información de las personas. Por este motivo, los fabricantes desarrollan líneas de productos específicas para estos países, denominados mercados emergentes, como India, México o algunos países de África. Para ellos crean móviles de última generación a precios asequibles para un bolsillo limitado.
Para muchos usuarios, la adquisición de un teléfono móvil a través de la subvenciónde un operador, asociado a un contrato de permanencia, es la única forma posible de disponer de este aparato. Sin embargo, antes de tomar la decisión de compra, es aconsejable conocer el precio del terminal libre en el mercado, así como las ofertas tarifarias de otros operadores, ya que a largo plazo puede resultar más económico a pesar del desembolso inicial del terminal.
En ocasiones, el supuesto ahorro implica un mayor coste debido al tipo de tarifa obligada a contratar con el terminal, o bien a que su coste libre no es muy diferente del ofrecido mediante un contrato de permanencia. Por otra parte, también es aconsejable estudiar el tiempo que el terminal lleva disponible en el mercado, ya que es habitual encontrar teléfonos con un año de antigüedad en los catálogos de los diferentes operadores, con un precio que no ha variado desde su lanzamiento, a pesar de que su sistema operativo probablemente se haya quedado obsoleto. Quizá sea posible encontrar esos mismos terminales a un precio más barato en el mercado libre.
