Sony, Microsoft y Nintendo son las empresas que copan el sector de las consolas de sobremesa. Nintendo fue la primera en renovar su consola con la Wii U, que salió al mercado el año pasado. Ahora le llega el turno a las nuevas máquinas de Sony y Microsoft, que se lanzarán en el último trimestre de 2013, lo más seguro que en noviembre, antes de la temporada de compras navideñas. Ambas aportan interesantes novedades y amplían sus funciones, con el objetivo de ser también un centro del ocio digital del usuario. Este artículo enumera los pros y los contras que ponderar en la Xbox One y la PS4 a la hora de decantarse por una u otra.
En estos meses de espera, donde la PS4 y Xbox One copan el protagonismo en el sector de los videojuegos, son numerosos los usuarios que tendrán que valorar qué nueva consola adquirir.
Un factor determinante es que en la Xbox One y la PS4 no existirá la compatibilidad con los juegos adquiridos para la generación anterior de estas consolas
Un factor determinante es que no existirá la compatibilidad de los juegos adquiridos para la generación anterior de las consolas. Por tanto, la decisión debe guiarse por otros factores, como los nuevos juegos disponibles y otros usos asociados a la consola, tales como la reproducción de contenidos en alta definición o las aplicaciones que se puedan descargar y que la enriquezcan en sus funciones.
Algunos analistas del sector, como Patrice Desilets, piensan que a la larga los usuarios avanzados de consolas terminarán comprándose las dos, porque en muchos aspectos tienen una elevada complementariedad.
Especificaciones técnicas
Hay que tener en cuenta que la calidad de los videojuegos o su realismo no vienen determinados tanto por la capacidad de una consola como por la tecnología empleada en el desarrollo del videojuego. Por eso, elegir la consola en función de algunos parámetros de hardware no significa que los juegos serán más rápidos o muestren más detalles.
Si las ponemos frente a frente, la Xbox One y la PS4 cuentan con una arquitectura de hardware y prestaciones muy similares
Si las ponemos frente a frente, ambas consolas cuentan con una arquitectura de hardware y prestaciones muy similares, ya que están basadas en las mismas premisas que los ordenadores domésticos PC, lo que permite ahorrar en costes al no contar con muchos elementos diseñados y desarrollados en exclusiva.
Tanto el procesador de la Xbox One como el de la PS4 está firmados por AMD, aunque no son iguales. Ambos comparten algunas características, como disponer de ocho núcleos y una velocidad de 1,6 gigahercios por cada núcleo. También tienen la misma memoria RAM: ocho gigabytes.
Pero la PS4 incorpora una nueva tecnología demoninada GDDR5, que cuenta con un mayor ancho de banda. Esto se traduce en una mayor velocidad de acceso a la memoria. Sin embargo, no lo notarán de forma palpable los usuarios y solo afecta a los desarrolladores de videojuegos.
Retrocompatiblidad
A pesar de que en un primer momento Microsoft anunció que el mercado de segunda mano de videojuegos de la consola tendría restricciones, debido a las protestas de los usuarios y algunos analistas, la empresa ha determinado que al final lanzar la Xbox One sin estas restricciones. Tampoco necesitará conectarse a Internet cada 24 horas para poder utilizar los juegos, como se había anunciado al principio. Con esta decisión, Microsoft elimina dos de las desventajas de su consola frente a la de Sony.
Sin embargo, debido al cambio de técnico de plataforma, los juegos comprados para las versiones anteriores de Xbox no son compatibles con el modelo One y, de momento, no se ha anunciado ningún sistema que permita el uso de los juegos antiguos. En el caso de la PS4, que también estrena una nueva estructura de plataforma, la retrocompatibilidad se conseguirá a partir de 2014 a través de Gaikai, una plataforma de videojuegos on line adquirida por Sony en 2012.
Por otra parte, los juegos comercializados para la Xbox One contarán con bloqueos regionales. Es decir, juegos comprados en una zona del mundo, como Australia, no serán compatibles con consolas de otra región, como España. En el caso de la PS4, el presidente de Sony Computer Entertainment adelantó en su cuenta en Twitter que no tendrá esta restricción.
Nuevos juegos
En las últimas semanas, tanto Sony como Microsoft han anunciado las diferentes franquicias y juegos exclusivos que saldrán a la venta junto con la consola. Estas listas no son definitivas, ya que se irán añadiendo nuevos juegos conforme se acerque la fecha de lanzamiento.
Para la consola PS4, entre otros juegos exclusivos, estarán Driveclub, Killzone Shadowfall, The Order 1886, The Witness y Knack. Mientras que para la Xbox One ya se han avanzado Forza Motorsport 5, Dead Rising 3, Titanfall, Killer Instinct, Ryse y Quantum Break. También se saben algunos juegos que saldrán para ambas plataformas: Call of Duty Ghost, Diablo III, Assassin’s Creed IV Black Flag, Need for Speed Rivals, Final Fantasy XV o Metal Gear Solid V, entre otros.
Precio y comercialización
Una de las diferencias entre ambas consolas viene marcada por el precio. De momento, solo se conocen las opciones básicas de comercialización.
La Xbox One saldrá a la venta en un paquete básico 100 euros más caro que la PS4, aunque esta última no incluye su detector de movimientos
La Xbox One saldrá a la venta en un paquete básico 100 euros más caro que la PS4, aunque se podría amortiguar la diferencia con la inclusión de algunos juegos y contenidos gratuitos. El paquete cuenta con un mando y el nuevo sistema Kinect y vendrá con un espacio de almacenamiento de 500 gigabytes. Todo ello a un coste de 499 euros.
Por su parte, la PS4 incorpora en su paquete básico un mando y un disco duro con un espacio de almacenamiento de 500 gigabytes. El sistema de detección de movimiento de la PS4, denominado PS4 Eye, no se introduce por defecto junto con la consola y es necesario adquirirlo de forma independiente a un precio de 50 euros. El importe del paquete básico de la PS4 será de 399 euros.