La actividad de la cría de perros sin control puede dar lugar a diversos damnificados: desde las hembras, que sufren sobreexplotación, hasta los cachorros que se venden a personas que no asumen su cuidado. En este artículo se habla sobre las consecuencias para la salud de la perra sometida a la cría intensiva y los efectos en la salud de sus cachorros. Además, se explica por qué esta situación de maltrato se debe denunciar.
Perras que paren demasiados cachorros: peligros
Una perra no precisa tener camadas a lo largo de su vida para estar sana y ser feliz. El hecho de parir no afecta a su grado de bienestar. No obstante, en el caso de que los dueños quieran que su perra tenga descendencia, los veterinarios recomiendan, como mucho, tres camadas a lo largo de su vida.
«Para que una perra no esté sobreexplotada en cuanto al parto y crianza de cachorros, como máximo debería parir tres veces en nueve años», explica Enrique Zaldívar, veterinario que trabaja en un estudio sobre la cría intensiva de perros.
Una perra tiene el celo cada seis meses y la gestación se alarga por dos meses. Una hembra que cría de manera intensiva sin que se respete su ciclo natural de recuperación y descanso tras cada embarazo, puede llegar a parir hasta en doce ocasiones a lo largo de su vida.
Perra sometida a la cría intensiva: consecuencias para la salud
La explotación de perras en el parto y la cría de camadas afecta a su salud y a la de sus cachorrosLas consecuencias para la salud de una hembra canina que cría más camadas de las recomendables para su bienestar, pueden ser anemia, patologías como la osteoporosis, debida al desgaste el calcio, así como la pérdida de dientes y alteraciones renales o hepáticas.Los estudios en España sobre las patologías de poblaciones de perras sobreexplotadas para la cría de cachorros son inexistentes por el momento. Pero el deterioro físico de una hembra sobreexplotada en la crianza se hace notar con la edad y hay perras que mueren durante los partos o por consecuencias asociadas.
Efectos en la salud de los cachorros
Los cachorros de las perras que paren más de lo recomendable también sufren las consecuencias de esta sobreexplotación. «Los veterinarios hemos detectado que las perras sobreexplotadas en la crianza tienen cachorros que padecen un tipo de sarna llamada demodécica, que les transmite la madre al poco tiempo de su nacimiento y que tiene consecuencias como la alopecia», afirma Zaldívar.
Otros efectos para los cachorros de perras demasiado parideras es que tienen las defensas bajas y sus reservas de calcio son escasas o padecen anemia. Además, estos pequeños pueden sufrir malformaciones, la presencia de parásitos intestinales e incluso morir durante el parto o a las pocas horas de haber nacido.
¿Es un delito sobreexplotar a las perras para que críen?
El propietario de un animal doméstico está obligado a velar por su bienestar y cubrir sus necesidades básicas: alimentación o atención sanitaria. Así lo recogen las leyes sobre bienestar y protección animal de las comunidades autónomas españolas, que también especifican las condiciones en que se deben encontrar los animales de los criaderos de perros.
Ana Mulá, abogada y miembro de la Comisión de protección de los derechos de los animales del Colegio de Abogados de Barcelona explica que «la declaración como núcleo zoológico y estar registrado como actividad comercial legal son requisitos a cumplir para las personas que se dedican a la cría y venta de perros».
Las denuncias ayudan a frenar la sobreexplotación de perras para la crianza de cachorrosLa actividad comercial con perras que crían es difícil de controlar en los domicilios privados. Según el teniente Óscar Fernández, de la Jefatura de Seprona de la Guardia civil, «no hay constancia de denuncias específicas en cuanto a sobreexplotación de perras para el parto y la cría de camadas».
Pero, en todo caso, «puede tratarse de un hecho constitutivo de delito, si así lo estima el juez, porque se pone en grave riesgo la salud del animal», afirma el teniente Fernández.
La colaboración ciudadana es fundamental para frenar este tipo de actividades, que son difíciles de detectar porque funcionan de manera solapada.
Cómo frenar la sobreexplotación en la cría de animales
La compra compulsiva de animales es uno de los motores que fomentan la explotación de las hembras para parir y criar camadas. Por ello, Mulá apunta que para frenar esta situación en España deberíamos tomar como ejemplo la iniciativa que se ha aplicado en California de prohibir la compra-venta de animales.
Otra medida que sugiere la abogada animalista es crear un impuesto que grave la compra-venta de perros por considerarlos un producto de lujo frente a la adopción de animales. De esta manera, se reduciría la posibilidad de especulación con las hembras a la hora de criar.
Las campañas de concienciación e información sobre las consecuencias de la cría indiscriminada de perros, las denuncias de los ciudadanos y esterilizar a las perras para evitar la sobreexplotación de hembras para parir y criar camadas.