Cada 10 de octubre se celebra el Día Mundial de la Salud Mental con el objetivo de aumentar la concienciación sobre los problemas de salud mental de la población y unificar esfuerzos entre todas las organizaciones e instituciones que luchan por dignificar la vida de las personas con enfermedad mental. Este artículo describe el porqué del lema de 2015 “Dignidad de la Salud Mental”, cómo garantizarla y la situación de la salud mental en España, así como la labor que lleva a cabo la Confederación Salud Mental España.
El lema: Dignidad de la Salud Mental
El objetivo de este día es concienciar a la población sobre las dificultades que se encuentran las personas con enfermedad mental
La Federación Mundial para la Salud Mental (World Federation Mental Health) ha elegido el lema «Dignidad de la Salud Mental» para esta jornada, con el objetivo de concienciar a la población sobre las dificultades que se encuentran las personas con enfermedad mental y sus familiares en el día a día tanto con la red asistencial como la sociedad en general. Dificultades en cuanto a la poca atención especializada, la escasez de recursos económicos, el desconocimiento y la falta de concienciación sobre salud mental, así como el estigma y aislamiento social de quienes sufren una enfermedad mental.
El primer artículo de la Declaración Universal de los Derechos Humanos declara que «todos los seres humanos nacen libres e iguales en dignidad y derechos». Sin embargo, muchas personas con enfermedad mental sufren abusos físicos, sexuales y emocionales. En ese sentido, velar en los distintos países por la aplicación de su legislación específica en cuanto a discapacidad mental y psicosocial es un gran reto para garantizar esta dignidad.
Cómo garantizar la dignidad
La organización WFMH en su Informe 2015 «Dignidad en Salud Mental» recomienda que para garantizar la dignidad de la salud mental, se ha de hacer visible la enfermedad sin avergonzarse de ella, reconocer cómo es y cómo se puede acompañar a las personas que la padecen.
Otras formas de dignificar la salud mental, entre profesionales de la salud y sociedad en general, serían:
- Enfocarse en la persona, su necesidad, saber reconocer su enfermedad y cómo afrontar sus crisis, escuchar sin juzgar.
- Favorecer su derecho a la participación en los diferentes aspectos de su vida (político, económico, social, familiar o sanitario).
- Dar apoyo emocional e información a quienes viven de cerca la enfermedad mental, además de generar planes de actuación individualizados y consensuados entre la persona con trastorno mental, sus familiares y los profesionales.
- Alentar a la persona en la búsqueda de apoyos familiares, de amigos y otras personas que puedan ayudarle.
- Empoderar a la persona en su capacidad para tomar decisiones que afectan a su vida y hacer valer sus derechos.
Salud mental en España
Alrededor de un millón de personas en España tiene una enfermedad mental grave
Según datos de la Confederación Salud Mental España, alrededor de un millón de personas tienen una enfermedad mental grave, es decir, entre el 2,5% y el 3% de la población adulta. Sin embargo, estas enfermedades se desconocen y pueden pasar desapercibidas socialmente entendiéndolas como una «debilidad» o «culpa» de la persona, y no como un trastorno o enfermedad mental.
Enfermedades como la esquizofrenia afectan a cerca del 0,7% de la población española y el trastorno bipolar al 0,5%. Es alarmante que más de la mitad de las personas con enfermedad mental que necesitan tratamiento no lo reciben y un porcentaje significativo no recibe el adecuado.
Dignificar la salud mental implica también integrar social y laboralmente a personas que padecen algún trastorno. Sin embargo, el empleo es uno de los principales ámbitos de estigmatización. Solo el 5% de las personas con enfermedad mental tiene un empleo regular y el 44% asegura haber sufrido algún tipo de discriminación laboral.
Con este lema la Confederación Salud Mental ha celebrado el Día Internacional de la Salud Mental 2015. Esta entidad sin ánimo de lucro, que integra a 19 federaciones autonómicas, lleva 32 años apoyando a las personas con enfermedad mental y tratando de garantizar su derecho a la participación en su propio proceso de recuperación.
Un claro ejemplo de cómo tratan de empoderar a la persona con un problema de salud mental es haciendo valer su derecho a la participación. Y lo han conseguido a través de los Comités de Personas con Enfermedad Mental, que funcionan desde 2009 como órganos asesores tanto de la Confederación como de sus entidades miembro.
En esta ocasión, el Comité de Personas con Enfermedad Mental elaboró y leyó durante la Jornada de celebración del Día Mundial de la Salud Mental un emotivo manifiesto invitando a la conciencia compartida sobre la enfermedad mental, a conectarnos y tender puentes con quienes son todo un mundo por descubrir.