Los consumidores están cada vez más concienciados para reciclar, pero a veces tienen dudas y no lo hacen de manera correcta. Para facilitar esta importante labor ambiental, se ha lanzado un nuevo símbolo para etiquetar los envases según el contenedor donde se tienen que depositar. Este artículo presenta el nuevo símbolo de reciclaje y explica en qué porcentaje nos equivocamos al reciclar y por qué es importante evitar los residuos impropios.
Nuevo símbolo de reciclaje
En 2014 se alcanzó en España un tasa de reciclado del 73,7%, según datos de Ecoembes, la sociedad sin ánimo de lucro gestora de los residuos del contenedor amarillo y azul. Las cifras de reciclaje han avanzado en los últimos años, pero todavía queda margen de mejora. Uno de los aspectos en los que se puede ayudar es en la disminución de los denominados impropios: los residuos depositados de forma equivocada en el contenedor de reciclaje. Resulta paradójico, pero su causa principal es la buena voluntad de los ciudadanos que quieren reciclar pero no lo hacen bien.
Los residuos impropios perjudican al reciclajeCon el objetivo de reducir estos impropios y facilitar la labor a las empresas y los consumidores, Ecoembes anunciaba recientemente un nuevo símbolo del reciclado de envases, un sistema voluntario en su aplicación y sin costes adicionales para las compañías, comentan sus responsables.
Algunas grandes firmas del sector de la alimentación ya han asegurado que lo incluirán en el diseño de sus productos, señala Cristina Muñoz, del equipo de Comunicación de dicha organización, que fomentará su uso entre las empresas adheridas a su sistema. Por ello, está previsto que en unos meses aparezcan los primeros envases con este símbolo incorporado, de forma que las compañías puedan aprovechar alguna modificación en sus diseños.
El símbolo está pensado para aparecer de forma visible en los envases más habituales: los ligeros que se depositan en el contenedor amarillo, los de cartón en el contenedor azul y los de vidrio en el contenedor verde. Cada uno de los símbolos lleva asociado el color del contenedor en donde debe depositarse el envase para conseguir su adecuado reciclaje, como se muestra en la siguiente imagen.
¿Nos equivocamos mucho al reciclar?
En 2014 se registró un 29,9% de impropios en los contenedores amarillos en nuestro país, según datos de Ecoembes. Muñoz explica que «a lo largo del tiempo esta cifra se ha reducido, a la vez que ha aumentado el porcentaje de reciclado de envases en España, debido sobre todo al progresivo incremento de la sensibilización ciudadana en esta materia. En 2005 esta cifra superaba el 37%, lo que indica con claridad cómo los españoles no solo reciclamos cada vez más, sino también mejor».
Antonio Barrón, director de comunicación de Ecoembes, recuerda algunos de los residuos impropios aparecidos con más frecuencia en los contenedores amarillos: coches teledirigidos, tablas de planchar, cintas de vídeo VHS o CD, etc.
La gran variedad de envases y productos de uso normal en los hogares genera dudas entre los consumidores que pueden evitarse, si se conoce cuáles de ellos se pueden reciclar y cómo.
Residuos impropios: por qué es importante evitarlos
Los residuos impropios perjudican al reciclaje. Barrón explica la razón para evitarlos: «Las plantas de selección no están preparadas para otros objetos fabricados a partir de diferentes materiales como gomas, textil, pilas, baterías, cables, etc. o de otros tipos de plástico. Estos residuos deben ir al Punto Limpio, a los puntos de recogida especial que los ayuntamientos ponen a nuestra disposición o, en su defecto, al cubo de basura tradicional».
La presencia de residuos inadecuados entorpece la labor de las plantas de selección y clasificación. Los operarios ven cómo se obstaculiza su trabajo y las máquinas se pueden parar o hasta estropear. El resultado: más posibilidades de avería, más ineficacia y peores resultados de reciclaje. Además, los residuos impropios pueden acabar en los vertederos.
Las cintas de vídeo o la ropa son algunos de los impropios más temidos, porque pueden atascar las máquinas. Elementos metálicos como sartenes, ollas u otros útiles de cocina pueden ser peligrosos. La distinta composición del cristal, cerámica o porcelana impide la creación de nuevos envases de vidrio.
En definitiva, cuantos más residuos se consiga reciclar, el medio ambiente más lo agradecerá: con los más de 1,2 millones de toneladas de envases ligeros y envases de cartón y papel reciclados el año pasado en todo el territorio nacional, se evitó la emisión de 1,2 millones de toneladas de dióxido de carbono (CO2) a la atmósfera (equivalente a retirar el 25% de los vehículos censados de Madrid), el consumo de 3 millones de megavatios/hora (MWh) (equivalente al gasto anual de energía del 31% de los teléfonos inteligentes en España) y de 24,5 millones de metros cúbicos de agua (equivalente al consumo de 400.000 personas).