El conducto flexible que une el grifo del cuarto de baño con la ducha es un elemento muy frágil. Generalmente, o se rompe la parte metálica que lo recubre o el tubo de goma que sirve como conducto del agua. Por eso es posible que sean varias las veces que se deban cambiar los flexibles de la ducha.
En primer lugar habrá que ir a una tienda especializada para comprar un flexible de ducha que se corresponda con el tamaño de las tuercas que lo unen tanto con el grifo como con la ducha. En primer lugar habrá que desenroscar los empalmes del tubo tanto con el grifo como con el teléfono de la ducha. A continuación se procederá a atornillar el nuevo flexible en el lugar que le corresponde.
Es importante para no estropear las tuercas que se protejan con unos trapos o con un trozo de cartón mientras se enrosquen.