Las especies invasoras podrían provocar en todo el mundo pérdidas económicas por valor de miles de millones de euros, debido a su impacto en las actividades agrícolas. Así lo apunta un estudio científico que no es el único en alertar de sus enormes y crecientes consecuencias negativas para el medio ambiente y la economía global. Este artículo señala cómo dañan las especies invasoras la agricultura, otros impactos que producen y qué podemos hacer.
Cómo dañan las especies invasoras la agricultura
Los insectos y patógenos invasores podrían causar daños a la agricultura mundial por valor de miles de millones de euros, y los países en desarrollo serían el blanco más grande. Así lo señala un artículo publicado en la revista Proceedings of the National Academy of Sciences (PNAS).
Las especies invasoras son una amenaza importante para la agricultura, los ecosistemas naturales y la sociedad en generalLos autores, un equipo de investigadores estadounidenses y australianos, han analizado el impacto de 1.297 plagas de insectos y patógenos invasores en 124 países. Y han determinado qué países podrían sufrir las mayores amenazas en función de sus relaciones comerciales y el número de especies invasoras. Como puede verse en el mapa de la imagen, los grandes productores mundiales agrícolas, Estados Unidos (EE.UU.), China, India y Brasil, tendrían el potencial de costes más alto. Los científicos auguran que, a medida que aumenta el comercio internacional y las conexiones entre países, los problemas relacionados con las especies invasoras se acumularán.
«Las plagas y enfermedades invasoras son una amenaza importante para la agricultura, los ecosistemas naturales y la sociedad en general. Uno de los principales desafíos es la predicción de la siguiente amenaza y saber desde dónde llega. Este estudio explora algunas de estas cuestiones a escala global», asegura uno de los autores del trabajo, Matthew Thomas, investigador en el Centro de Dinámica de Enfermedades Infecciosas de la Universidad Estatal de Pensilvania (EE.UU.). El científico, especialista en Entomología ecológica, recuerda los problemas que en su país causan, por ejemplo, el barrenador esmeralda del fresno (una avispa parásita originaria de China) o el mosquito tigre asiático, así como la potencial amenaza del virus del Zika, transmitido por el mosquito Aedes aegypti.
Los países en desarrollo más pequeños pueden sufrir daños proporcionalmente mayores que los grandes países agrícolas, destaca también el estudio. En concreto, los países más vulnerables se encontrarían en el África subsahariana. Esto se debe a que en general estos países no tienen una economía diversificada, de manera que poseen una dependencia desproporcionada de la agricultura.
Otros impactos de las especies invasoras
Además de los impactos en la agricultura, los expertos en especies invasoras señalan diversos daños económicos y ambientales: modificación, pérdida y destrucción de los hábitats y ecosistemas nativos e intensificación de la erosión; reducción de la biodiversidad, competencia, desplazamiento, depredación y extinción de especies autóctonas; transmisión de enfermedades; aumento del peligro de extinción de las especies locales; e incremento del riesgo de incendios.
En algunos casos, las especies invasoras conllevan pérdidas anuales millonarias que se han calculado en diversos estudios. La Comisión Europea (CE) estima que controlar la invasión y reparar el daño provocado cuesta a las economías europeas, al menos, 12.000 millones de euros al año. Sus responsables recuerdan que las islas apartadas, ricas en biodiversidad, son muy vulnerables y pueden sufrir un enorme impacto.
Un informe publicado en la revista Frontiers in Ecology and the Environment cuantificaba en cifras económicas las consecuencias de algunas de las principales especies invasoras en Europa. Sus autores ofrecían varios ejemplos: Chrysochromulina polylepis, un tipo de alga unicelular muy extendida en Noruega, provoca un gasto anual de 8,2 millones de euros; el jacinto de agua supone un desembolso de 3,4 millones en España; el coipo, 2,8 millones en Italia, etc.
Qué podemos hacer contra las especies invasoras
Los especialistas recuerdan que en la mayoría de los casos, cuando una especie ya ha invadido un área, es muy difícil y caro erradicarla; a veces incluso resulta imposible. Por eso, la única arma efectiva es la prevención. En cuanto a los ciudadanos, pueden hacer muchas cosas para evitar la invasión de una especie:
- Informarse sobre la problemática de las invasiones biológicas, compartir estos conocimientos con los conocidos y reclamar a las autoridades las medidas necesarias.
- Plantar especies autóctonas, ya que, aunque muchas especies exóticas no son invasoras, las autóctonas ofrecen otras ventajas, proveyendo cobijo y alimento a la fauna nativa.
- Evitar comprar mezclas de semillas, en especial las denominadas «flores silvestres», ya que muchas de estas mezclas contienen especies invasoras.
- No adquirir mascotas exóticas. En el caso de hacerlo, recoger y exigir toda la información sobre ella, lo que ayudará a cuidarla mejor e, indirectamente, a proteger el medio natural.
- No consumir productos como la perca del Nilo, porque conllevan la destrucción del medio ambiente de donde provienen, además de una catástrofe social.
- Los pescadores, limpiar bien los aparejos de pesca y su equipamiento.
- Y si se viaja, limpiar las botas, pues pueden llevar semillas u otros organismos.